domingo, 3 de diciembre de 2023

Gianni Vattimo y su propuesta de un falso cristianismo (2/2)

Francamente hablando, debemos concluir que Gianni Vattimo no ha logrado conocer en su vida al Espíritu de fortaleza y a la fuerza del pensamiento, y ello debido a una forma de personal actitud renunciataria o derrotista, una falsa humildad delante de Dios, y una reprochable condescendencia hacia sus personales debilidades (resaltadas por todos sus biógrafos). El caso es que en la vida nunca debemos darnos por vencidos, y el adaptarnos o apoltronarnos en nuestras debilidades no es señal de un alma noble sino de un alma mezquina, por mucho que queramos cubrirla con sutiles justificaciones sacadas de supuestas filosofías.

La verdadera violencia al prójimo es el escepticismo y el relativismo
   
----------Vattimo hace bien en rechazar la violencia y en profesarse respetuoso de las opiniones de los otros; pero confunde por violento a aquel que, consciente del válido fundamento de sus ideas, en la certeza de tener razón y de conocer lo verdadero, sobre todo si involucra a los supremos valores, lo afirma con resolución, decisión, coraje, linealidad, claridad y refuta el error contrario.
----------Debe tenerse en cuenta que nadie, desde el mismo momento en el cual piensa y juzga, puede impedir asumir posiciones absolutas afirmando lo que él considera verdadero y oponiéndose a lo que él considera falso. Incluso Vattimo, precisamente en el momento en el cual sostiene su oportunismo relativista, se ve constreñido a asumir esta actitud, por lo cual está claro que Vattimo se refuta por sí solo.
----------Dice Vattimo: "En nombre de la verdad, hemos sembrado víctimas humanas a lo largo de la historia". Hay aquí un patente sofisma. ¿Qué hacer entonces? ¿Renunciar a la afirmación de la verdad para practicar la mansedumbre y la misericordia? Vattimo, sin embargo, no renuncia a la convicción de decir la verdad mientras pronuncia semejantes tonterías. ¿De dónde surge la sabiduría de no hacer víctimas inocentes, sino de la posibilidad de conocer y hacer conocer la verdad sobre nuestro deber?
----------Leamos esta otra verdadera "joya" de sabiduría que nos ofrece el "pensamiento débil" de Vattimo: "Litigar con la filosofía neo-tomista y neo-escolástica, criticar radicalmente la teología y a los teólogos magisteriales o aquellos alineados con el status quo, significa enfrentarse explícitamente a quienes no pueden renunciar, en la exteriorización de su fe, al 'ser' griego, de matriz parmenídea.
----------Encontramos esta posición en los frecuentes discursos del papa Benedicto XVI, quien ha defendido como tradición católica constitutiva e indispensable la presencia del 'ser' en la reflexión teológica. Una toma de posición sumamente radical, que el teólogo-papa llega incluso a afirmar que no puede haber teología sin metafísica. Fue también -y quizás sobre todo- sobre la base de este criterio que durante los treinta años de los pontificados de san Juan Pablo II y Benedicto XVI, muchos teólogos, cerca de doscientos, fueron condenados o indagados por la Congregación para la Doctrina de la Fe".
----------Nótese la insinuación de los "cerca de doscientos teólogos" (si es que esto es cierto, pero francamente yo no lo creo, porque de lo contrario la prensa modernista quién sabe cuánto habría pregonado y trompeteado) que habrían sido condenados en los años de san Juan. Pablo II y Benedicto XVI, y que serían las víctimas inocentes de la persecución papal en nombre de la metafísica parmenídea del ser, calumnia que homologa la sabiduría doctrinal de la Iglesia con la filosofía eternalista-panteísta de Severino.
----------Veamos ahora otra afirmación de falsedad evidente, que atestigua el absoluto desprecio vattimiano por la metafísica: "Los biblistas simplemente ignoran, en su enfoque hermenéutico, cualquier referencia crítica explícita a la metafísica o a cualquier otro sistema filosófico".
----------Se constata en esa declaración de Vattimo el grueso error de Lutero, principio de todas las herejías del "reformador" alemán, al haber pretendido comprender directamente el sentido de la Palabra de Dios con el pretexto de su trascendencia respecto al pensamiento humano, sin valerse de los instrumentos noéticos y hermenéuticos ofrecidos por la metafísica, cuando toda la sustancia de la sabiduría bíblica desde el Génesis hasta el Apocalipsis, está inervada en las nociones metafísicas espontáneas de la mente humana, ciertamente no elaboradas de modo científico, y sin embargo, como alma del texto literal, completamente incomprensible y equivocable en su sentido divino, si no es abordado a la luz de la sabiduría bíblica. Al respecto, véase en este mismo blog un resumen acerca de las nociones metafísicas que subyacen a la enseñanza del mismo Cristo, en mi artículo: Breve nota sober la Metafísica de Jesús.
----------Por tanto, lo que Vattimo dice para excluir el uso de la metafísica es también un sofisma; como cuando expresa lo siguiente: "en la escuela de Francisco y Clara, la Palabra de Dios es suficiente para alimentar y sostener la fe de los discípulos". Es verdad que no parece que san Francisco y santa Clara hubieran estudiado a Aristóteles: pero esto no quita valor a cuanto he dicho, porque ciertamente los dos grandes Santos sabían que Dios es Aquel Que Es (Ex 3,14) y que ha creado el mundo de la nada. Y sin la inteligencia estas cosas metafísicas no se pueden entender, sin que por ello sea necesario estudiar a Aristóteles.
----------Por tanto, lo verdadero es lo opuesto a cuanto sostiene Vattimo: la metafísica es indispensable para comprender el mensaje divino de la Escritura, que nos presenta la noción de Dios entendido como el mismo Ser subsistente (Ex 3,14). La metafísica educa y potencia la razón más allá de su debilidad debida al pecado original y le dona la fuerza para abrirse a la divina Revelación a acoger en la fe.
----------Por consiguiente, violento no es quien conoce la verdad sobre Dios o sobre la moral o sobre el hombre, y la profesa y la defiende, refutando a sus adversarios, sobre todo si se trata de verdad dogmática definida por la Iglesia para el bien de los hermanos y obedece al mandato de Cristo a costa de sacrificios y de la vida.
----------Hablar, como hace Vattimo, de violencia de la metafísica es un grueso disparate, inaceptable en quien pretenda estar cualificado como filósofo. Si existe un saber libre y a la vez liberador, promotor de libertad, ese es precisamente la metafísica, con su intransigencia, su perentoriedad, su robustez, solidez y estabilidad, su seguridad, sus afirmaciones absolutas e incondicionales, sin consideraciones hacia nadie.
----------En efecto, ¿qué es la libertad sino la capacidad de elegir sobre la base y en el horizonte de la verdad establecida? ¿Con qué juicio decido mi destino eterno sobre la base de un pensamiento tan débil que hoy existe y mañana desaparece? ¿Acaso soy una hoja al viento, o en cambio una persona dotada de un alma inmortal? Por tanto, es precisamente la certeza de la verdad absoluta aquel estado psicológico que permite al sujeto ejercer el querer hacia el otro para favorecer en él la libertad ofreciéndole el don de la verdad.
----------Violento, por el contrario, es Vattimo, cuyo espíritu está claramente sujeto al fluctuar de la imaginación y no es firme en el pensamiento, el cual precisamente cuando es el caso que está privado de tal solidez, no calma la voluntad y hace violencia a las conciencias con el engaño y la mentiras, dándoles a entender que la certeza de estar en la verdad es violencia hacia el prójimo, mientras que, a la inversa, es la condición necesaria para prestarle al prójimo un auténtico servicio de caridad y de misericordia.
----------Ciertamente, la más grave violencia no es aquella del señor que grita contra el operario ni aquella del violador que agrede a una mujer o aquella de quien insulta al vecino de casa, sino que es aquella violencia que el astuto espíritu de la mentira ejerce sobre las conciencias minando sus certezas, poniendo en duda lo que es evidente, poniendo en discusión lo que ha sido definido o demostrado, haciéndoles creer que lo que era verdad ayer ya no es verdad hoy o que lo que es verdad para mí no es verdad para tí o que los dogmas de la Iglesia van cambiando de significado a través de la historia.
----------La Biblia pide un pensamiento fuerte y no un pensamiento débil, que se detiene en la apariencia del ser y no sabe ir más allá, se detiene en las sombras y en los fantasmas y no sabe elevarse a las dimensiones ontológicas y espirituales de las personas en carne y hueso.
----------Vattimo, en su propio pensar, se considera de tal manera fuerte como para incluso llegar a "superar" (überwinden), como dice Heidegger, mediante la razón, a la metafísica, ¿pero para llegar a dónde? ¿Acaso para llegar al saber sobrenatural cristiano? Ni siquiera por idea; sino llegar al Dasein heideggeriano, que no es otra cosa que el ser temporal y local del hombre como ser-aquí del hombre que se interroga sobre el ser.
   
Falsedad de Vattimo acerca del cristianismo
   
----------Refiere Lazzarin, en el artículo sub examine, que Vattimo "radicaliza el tema de la 'muerte de Dios' de Nietzsche y de la 'metafísica de la superación' de Heidegger. E incorpora en su pensamiento el único aspecto para él inalienable del cristianismo: la kénosis, el divino y extremo vaciamiento de la humanidad de Jesús, que nos presenta a un Dios débil, impotente, inerme, sin omnipotencia y sin autoridad.
----------Kenosis que se identifica con el ágape, caritas, revelada en plenitud por la crucifixión: 'Padre, perdónalos, porque no saben lo que hacen' (Lc 26,34). Ágape, que derrota, definitivamente y sin violencia, la violencia inherente a lo 'sagrado natural' (René Girard) de las religiones. Ágape que, para él, se caracteriza como diálogo con todas las opciones ideológicas y morales, con la exclusión categórica de las ideologías violentas".
----------La observación que es necesario hacer a esas afirmaciones de Vattimo reportadas por Lazzarin, es que la kénosis de la cual habla san Pablo no tiene nada que ver con un absurdo vaciamiento de la propia esencia por parte de Dios, sino que significa simplemente, como explica santo Tomás de Aquino en su Comentario a las lecturas de las Epístolas de San Pablo, en Flp 2,7 (l.II, n.56, Edizioni Marietti, Torino-Roma 1953, p.101), la humildad de Cristo al asumir la naturaleza humana.
----------Ciertamente en la crucifixión, es decir, en el dar la propia vida por nuestra salvación, Cristo muestra la cumbre de su amor por nosotros. Pero con este sacrificio suyo, Cristo no vence ningún "sagrado natural", el cual no implica violencia alguna, sino homenaje a Dios, y de hecho realiza un sacrum sobrenatural, que expía nuestras culpas y nos reconcilia con el Padre. Ciertamente el agápe para Cristo "se caracteriza como diálogo con todas las opciones ideológicas y morales, con la exclusión categórica de las ideologías violentas".
----------El Dios impotente es una tomada de pelo. Atributo divino es la omnipotencia, por la cual Dios puede todo lo que es posible, crea el mundo y realiza los milagros. Débil ha sido Cristo como hombre para salvarnos por medio de su debilidad, de modo que con san Pablo en Él podamos decir "cuando soy débil, entonces soy fuerte" (2 Cor 12,10). "Cristo fue crucificado por su debilidad, pero vive por el poder de Dios" (2 Cor 13,4).
----------La moraleja es clara: no nos inventemos un Dios débil para legitimar nuestras debilidades. Estamos llamados a vencer nuestras debilidades con la fuerza de Dios. No tomemos como pretexto o excusa la debilidad de la carne para justificar la debilidad del espíritu. El hecho es que Gianni Vattimo no ha logrado conocer en su vida al Espíritu de fortaleza y a la fuerza del pensamiento, y ello debido a una forma de personal actitud renunciataria o derrotista, una falsa humildad delante de Dios, y una reprochable condescendencia hacia sus personales debilidades (resaltadas por todos sus biógrafos). En la vida nunca debemos darnos por vencidos, y el adaptarnos o apoltronarnos en nuestras debilidades no es señal de un alma noble sino de un alma mezquina, por mucho que queramos cubrirla con sutiles justificaciones sacadas de la filosofía.
----------Por otra parte, Lazzarin, en su artículo, sintetiza así el pensamiento de Vattimo en lo que respecta al ámbito de su actitud religiosa: "Jesucristo ha venido al mundo para revelar que la religiosidad no consiste en los sacrificios, sino en el amar a Dios y al prójimo. Todo aspecto que en la Iglesia no se reduzca a esta única verdad, ¿no será tal vez todavía una religión natural y victimaria?".
----------Hago la observación de que el ofrecimiento de la víctima del sacrificio es acto esencial de la virtud de religión y tal acto es el fundamento de la religión cristiana: el ofrecimiento sacerdotal que Cristo hace de sí mismo al Padre en satisfacción a Él por nuestros pecados, ofrecimiento que ha sido hecho en modo cruento en la cruz y representado incruentamente en el sacrificio de la Misa. Todavía refiere Lazzarin:
----------"Como revelador de los aspectos constitutivos victimizantes y sacrificiales de las religiones arcaicas, el cristianismo no es una religión, sino que es íntimamente el de-constructor de la religión. Para Vattimo, Jesús es la Verdad como persona, acontecimiento y Evangelio, pero no se identifica con la verdad que hemos heredado de la tradición filosófica. Jesús nos ha liberado de esta verdad".
----------Repito que el ofrecimiento del sacrificio es el acto propio de la virtud de religión, ya sea arcaica o moderna. Por tanto, decir que el cristianismo no es una religión es negar el sacrificio de Cristo, lo que es destruir el cristianismo desde sus fundamentos. ¿Qué es, de hecho, el cristianismo sin la cruz?
----------Jesús es ciertamente la Verdad como persona, acontecimiento y Evangelio. Pero no podemos captar la verdad divina sin pasar y partir desde la verdad racional o filosófica. Sólo Dios conoce directamente a Dios. Nosotros lo conocemos partiendo de las creaturas. ¿Dónde está entonces el catolicismo de Vattimo?

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