El templo: ¿todavía tiene sentido hablar de lugar sagrado? (2)

Es cierto que el corazón del hombre está destinado a ser templo de Dios y que el templo de piedra es funcional a este templo interior. Pero esto no debe llevar a rechazar el edificio de culto, precisamente por el hecho de que en él se celebra la Santa Misa y se conserva el Santísimo Sacramento.

El culto divino se celebra en un templo

   

----------Para cumplir convenientemente los actos de agradecimiento a Dios, de homenaje a Dios, de obediencia a Dios, el hombre religioso, deseoso de encontrar a Dios, de reconciliarse con Él, de hacerle sacrificios y de obtener su benevolencia, siente la necesidad de elegir ciertos lugares hermosos y adecuados, donde eventualmente lo divino ya ha aparecido antes y ha dado señales de benevolencia o de protección.

----------Estos lugares constituyen espacios sagrados, que quedan artificialmente delimitados o circunscriptos y sustraidos a la profanidad del espacio circundante. En ese espacio se construye el templo, voz de origen latino (templum), a su vez derivada del verbo griego temno = cortar, es decir circunscribir. De temno deriva tèmenos, que es el templo y la con-templación, que es la mirada devota que se vuelve a Dios presente en el templo. En el templo católico, el objeto divino contemplado y adorado es el Santísimo Sacramento.

----------El profanum y el fanum, es decir, lo profano y lo sagrado, vinculado al templo, son distintos pero ambos se comunican, como es distinto lo humano de lo divino. Sin embargo se comunican. ¿Y cómo se comunican lo profano y lo sagrado? Lo primero prepara para lo segundo e introduce a lo segundo, como la razón prepara para la fe e introduce a la fe. De lo segundo surge la virtud divina que sana, y da fuerza y ​​fecundidad a lo primero, como está descripto en la sugestiva visión de Ezequiel (c.47).

----------Preocupación del hombre religioso es la de construir un templo sólido, que desafíe la usura del tiempo y la acción de los agentes atmosféricos, y esto es así porque el templo debe representar la firmeza y la solidez de lo divino, su eternidad e inmutabilidad, su resistencia a las fuerzas contrarias. Por ello encontramos en tantos lugares templos antiquísimos de las más diversas religiones.

----------El templo, sobre todo en el pasado, ha estado sujeto a cambios de consagración con el advenimiento de una religión que sustituye a una religión anterior. Así, por ejemplo, con el advenimiento de la era constantiniana, muchos templos paganos han sido convertidos en templos cristianos. Famosa entre todas ha sido la conversión en mezquita de la basílica de Santa Sofía en Constantinopla.

----------Hoy en los países occidentales vige la libertad religiosa y por consiguiente está permitida, por ejemplo, la construcción de mezquitas. No es reconocida pareja libertad para el templo cristiano por parte de los países islámicos, donde la iglesia cristiana debe estar eventualmente ocultada en la vía pública. Ejemplo de rica variedad de templos, sobre todo de las tres religiones monoteístas, es Tierra Santa.

----------En la casa de Dios no hay nada de todas esas cosas que reflejan las miserias y las necesidades de este mundo, sino que el templo está hecho para los que ya aquí abajo viven en el más allá. Sin embargo, las instituciones que sirven para satisfacer las necesidades terrenales siempre están inspiradas en la frecuentación o asistencia al templo y viven junto al templo. Una asistencia al templo que no diera estos frutos de caridad y de misericordia sería una concurrencia al templo simplemente falsa e hipócrita.

----------En el templo y en la liturgia tenemos el anticipo y la anticipada experiencia de la alegría de la humanidad futura, de la Jerusalén celestial de la humanidad pacificada y en comunión con Dios. La comunidad litúrgica es el modelo de toda comunidad terrena y le indica su meta final.

----------Recordemos que el profeta Isaías alaba al templo de Jerusalén con palabras que son sublimes, y que tienen un perfume escatológico, como para presentar el templo como anticipo o lugar precursor de la humanidad futura viviendo en la justicia, en la armonía y en la paz:

----------"Sucederá al fin de los tiempos, que la montaña de la Casa del Señor será afianzada sobre la cumbre de las montañas y se elevará por encima de las colinas. Todas las naciones afluirán hacia ella y acudirán pueblos numerosos, que dirán; '¡Vengan, subamos a la montaña del Señor, a la Casa del Dios de Jacob! El nos instruirá en sus caminos y caminaremos por sus sendas'. Porque de Sión saldrá la Ley y de Jerusalén, la palabra del Señor. El será juez entre las naciones y árbitro de pueblos numerosos Con sus espadas forjarán arados y podaderas con sus lanzas. No levantará la espada una nación contra otra ni se adiestrarán más para la guerra. ¡Ven, casa de Jacob, y caminemos a la luz del Señor!" (Is 2,2-5).

----------El templo de Jerusalén daba posibilidades a predicadores o rabinos de enseñar la Ley o la Palabra de Dios con la autorización del sacerdote custodio del templo. Así, Nuestro Señor se valió varias veces de esa facultad predicando y discutiendo en el templo. Jesús enseñaba en el templo, a veces no sin algún incidente o sin recibir alguna oposición de parte de los sacerdotes (Mc 12,35; 21,12; 24,1; Lc 2,46; Jn 10,23). Y también los Apóstoles, después de la resurrección de Jesús, enseñan en el templo (Hch 2,46).

----------El espacio sagrado acoge a cualquiera, incluso si está manchado de graves delitos, recibe al momento protección, pero con la condición de que este gesto suyo no sea un pretexto para sustraerse a la justicia. Sin embargo, hace referencia a la misericordia divina, que acoge y perdona al pecador arrepentido y dispuesto a hacer penitencia. De hecho, en todas las iglesias se suele celebrar el sacramento de la penitencia.

----------Hoy, como en toda época, el abandono de la religión va de la mano con el abandono de la metafísica, que es el saber fundamental universal, que da la justificación radical y de fondo a la religión, que por tanto no es más que una aplicación de la metafísica en el campo de la teología, de la antropología y de la moral. A la inversa, repristinar la estima por la metafísica y por los valores morales absolutos y universales, por el derecho natural y por la ley natural, significa e implica hacer resurgir la estima hacia la religión.

----------Si nuestra sociedad occidental todavía se encuentra de alguna manera vigente, y aún no ha retornado a las condiciones del hombre prehistórico, si tantos de nuestros contemporáneos que no entienden nada de metafísica, o incluso se creen ateos, sin embargo son sensibles a los valores humanos de la justicia y de la misericordia, esto es así porque en realidad, al menos a nivel inconsciente, ellos han permanecido en contacto con Dios sin saberlo y de ahí, también sin saberlo, reciben la gracia que los hace hombres rectos y honestos, aunque no todavía religiosos y, de hecho, ignorantes en términos de metafísica.

   

El templo cristiano

   

----------El templo cristiano es el templo de la Nueva Alianza y del nuevo sacerdocio, instituido por Nuestro Señor Jesucristo, para la vida presente, aquí abajo, en vista de la futura abolición del templo, porque ya no será necesario el templo en la futura Jerusalén celestial, como dice san Juan: "No vi ningún templo en la Ciudad, porque su Templo es el Señor Dios todopoderoso y el Cordero" (Ap 21,22).

----------Sin embargo, Juan en el Apocalipsis ve un "templo que está en el cielo" (Ap 14,17). De este templo y de su altar salen ángeles ministradores de los flagelos divinos, que deberán preparar la Venida final de Cristo (cc.15-16). Se puede pensar que este período corresponde a los castigos que Dios enviará para dar punición a los provocadores de la apostasía final, de la cual habla san Pablo.

----------Este templo del cual habla Juan en el Apocalipsis, obviamente, ya no es el templo de la vida presente donde se celebra la Santa Misa, sino que no es otro más que el templo de la voluntad de Dios, que dispone los últimos actos de la historia de la humanidad en preparación para el Juicio universal.

----------Si sabemos que "la gloria del Señor llenó el templo" (2 Cro 7,1; Ez 43,5 y 44,4) de Salomón, donde se sacrificaban animales, ¿cuánto más la gloria del Señor no llenará el templo cristiano, donde el sacerdote ofrece al Padre el sacrificio de su propio Hijo y donde es conservado el Santísimo Sacramento?

----------San Pablo subraya el hecho de que con la primera venida de Nuestro Señor Jesucristo, el templo del Señor ya no es tanto el templo de piedra, sino el mismo corazón cristiano, habitado por la Santísima Trinidad; es el cuerpo del cristiano, alimentado y vivificado por el cuerpo y por la sangre del Señor. Sin embargo, esto no quita que permanezca aún para nosotros la necesidad del templo de piedra.

----------La liturgia cristiana, como decía el papa Pío XII, es participación en el culto que el mismo Hijo de Dios rinde al Padre. Es necesario distinguir, por un lado, la liturgia como acción sagrada sacramental, que culmina en la celebración de la Misa y de los sacramentos, y, por otro lado, los sacramentales, las ceremonias y los ritos litúrgicos. La primera es acción de Cristo por el trámite del sacerdote o del ministro.

----------Frente a la Iglesia, el ministro no tiene otro deber, otro oficio, y otra tarea, más que el de participar fielmente y exactamente en la acción de Nuestro Señor Jesucristo. Las ceremonias constituyen las expresiones o modalidades externas convencionales de la celebración de los sacramentos, y su forma está regulada y disciplinada por mandato de Cristo por el poder santificador de la Iglesia de atar y desatar, según los tiempos, los lugares, las circunstancias y las conveniencias.

----------He aquí, por ejemplo, el motivo y la razón de la transición del rito de la Misa del vetus ordo al novus ordo. He aquí el motivo de la institución de los actuales ministerios femeninos, que nunca antes habían existido. He aquí el motivo de la Comunión en la mano, que ya no existía desde hacía siglos.

----------Existen grados de importancia en las celebraciones litúrgicas en función de la importancia de la Memoria que es necesario celebrar en cada momento. Así, en orden decreciente, existen solemnidades, fiestas y memorias, Misas de precepto y Misas facultativas, Misas para las más diversas circunstancias, memorias universales y memorias locales, Misas para asociaciones y Misas para el pueblo, Misas conventuales y Misas parroquiales, Misas privadas y Misas concelebradas.

----------La ceremonia litúrgica eleva el espíritu humano excitando la sensibilidad (incluso estética), pero al mismo tiempo ese placer sensible y estético se cumple a través del lenguaje del espíritu, ilumina el intelecto y mueve el afecto y la voluntad. Por eso, en la acción litúrgica, aparecen todas las formas de expresividad sensible humana, sentidos externos y sentidos internos, mientras que la sensibilidad recibe satisfacción en todas sus modalidades y facultades, excluyendo las sexuales, que son ajenas del culto a Dios, un culto que es puramente espiritual, siendo Dios puro Espíritu, causa de una alegría que es solo espiritual, ya que nos hace gustar las primicias de las realidades celestiales. De ahí la conveniencia de que hombres y mujeres usen una vestimenta adecuada y tengan un comportamiento tal como para ofrecer la expresión más noble de la masculinidad y de la feminidad, renunciando a lo que puede estimular el placer sexual.

----------A menudo hoy, en cambio, desafortunadamente, hay jóvenes que en la iglesia están vestidos como si estuvieran en la playa o visitando las Cavernas de las Brujas. Y esto, lamentablemente, ocurre también con otros no tan jóvenes. A menudo, también, las mujeres mayores parlotean en la iglesia, tanto antes como después de la Misa, tal como si estuvieran en una esquina del barrio, en la feria, o en la plaza.

----------Estos son algunos signos simples pero significativos de la confusión entre lo sagrado y lo profano y de la pérdida de la percepción de la diferencia entre lugar sagrado y lugar profano. Se ha perdido la apreciación del sagrado silencio y se lo confunde con mal humor o antisocialidad.

----------Si se ingresa a un templo, cuando está abierto en los a veces limitadísimos horarios de apertura, ya no se advierten personas en oración o en adoración o en meditación, sino que la iglesia está simplemente vacía o quizás visitada por un grupo de turistas. Mi convicción es que en la actualidad la soledad silenciosa con Dios es considerada una pérdida de tiempo, y frecuentemente se la ve como una falta de sociabilidad. Hoy las palabras de san Juan María Vianney, "Yo le hablo y Él me habla", hacen reír a la gente.

----------La visita a las iglesias ya no es considerada como momento de reaprovisionamiento espiritual o de consuelo o búsqueda de luz o de perdón de Dios, sino simplemente como visita turística a un museo. Y de hecho, muchas iglesias han sido transformadas en museos. Las imágenes sagradas que allí estaban presentes, en muchos casos han sido trasladadas a galerías de arte, que se han convertido en los lugares de culto de la religión masónica. El Louvre de París contiene muchas bellísimas obras de grandes artistas italianos, robadas por Napoleón Bonaparte de las iglesias italianas y hechas trasladar a Francia.

----------Otro aspecto a tener en cuenta, es que la liturgia va de la mano de la paraliturgia, que es un conjunto de prácticas piadosas o actos religiosos o reuniones religiosas, dedicados a la formación cristiana, a la lectura de la Sagrada Escritura, o a la oración o a la adoración eucarística, o bien al compartir de la vida cotidiana o a la instrucción recíproca con eventuales propósitos de actos caritativos hacia el prójimo y hacia los necesitados. Pensemos, por ejemplo, en el Vía Crucis o en la recitación del Santo Rosario o en la lectura de algunos libros de espiritualidad o en el montaje de sagradas representaciones.

----------Actos litúrgicos o religiosos son también los sacramentales, como por ejemplo la obtención de las indulgencias, el ofrecimiento de ex-votos, las bendiciones eucarísticas y comunes, las rogativas, la consagración de religiosos, los exorcismos, las peregrinaciones, el pesebre, el culto de las reliquias y de las imágenes de los Santos, los retiros espirituales, las visitas al cementerio y las visitas a los lugares santos, la procesión religiosa para rendir alabanza, honor y gloria a algún Santo, o a la Virgen o sobre todo al Santísimo Sacramento. En este punto, vale recordar que la procesión con el Santísimo Sacramento inauguró la convocatoria de los Estados Generales, que desembocó en la Revolución Francesa.

----------En su Carta, el apóstol Santiago dice con descarnada franqueza sin medias tintas: "Si alguien cree que es un hombre religioso, pero no domina su lengua, se engaña a sí mismo y su religiosidad es vacía. La religiosidad pura y sin mancha delante de Dios, nuestro Padre, consiste en ocuparse de los huérfanos y de las viudas cuando están necesitados, y en no contaminarse con el mundo" (St 1,26-27).

   

El arte sagrado

   

----------El arte sacro expresa, en las habituales formas del arte de todos los tiempos, el ejercicio, las formas, los medios y los propósitos de la liturgia. El arte sacro tiene precisamente su máxima expresión en la construcción de las iglesias y en su decoración. Requiere un refinado gusto estético, que armonice con los sentimientos que son suscitados por lo sagrado y que favorezca la experiencia de lo sagrado, en la observancia de las normas y de los ritos de la liturgia, bajo la presidencia de la autoridad eclesiástica.

----------Muchos y variados son los objetos y los aspectos del arte sacro: desde los vasos sagrados, hasta los íconos, las vestiduras sagradas, los cantos sagrados, los objetos sagrados, el mobiliario y los suplementos del altar, la danza sagrada, las decoraciones sagradas, las sagradas representaciones.

----------Las iglesias a lo largo de los siglos se han enriquecido con los diferentes aportes artísticos de diferentes épocas, y los templos cristianos se han convertido en una lección de historia: se convierten en el relato, la narración, el mensaje de la Iglesia del pasado, testimonios de la tradición y de las tradiciones, preservando la memoria y los monumentos de los padres y de los santos que nos han precedido.

----------Es cierto que el corazón del hombre está destinado a ser templo vivo de Dios y que el templo de piedra es funcional a este templo interior y espiritual. Pero esto no debe llevar a rechazar el edificio de culto por el hecho de que en él se celebra la Misa y se conserva el Santísimo Sacramento.

----------No es que lo profano y lo secular o laico no tengan relación con Dios. Pero esta relación es mejor, más fácil, más intensa, más elevada, más santa en el horizonte de lo sagrado, vale decir, en la vida del religioso y del sacerdote, siempre obviamente que ellos sean fieles a su vocación sagrada.

----------En efecto, la conducta moral del hombre, como lo demuestra la ética evangélica y las religiones en general, está sujeta a dos niveles de orientación hacia Dios: existe el nivel de base, común a todos, al menos como nivel o grado de punto de partida, es decir, la vida laical, secular, en el siglo, en el mundo, que es el horizonte de lo pro-fanum, lo que está junto a lo fanum, es decir, junto a lo sagrado; y por encima de este nivel, para satisfacer una más alta necesidad de espiritualidad y de unión con Dios, se da la orientación relativa a lo sacrum, vale decir, la orientación del religioso y del sacerdote.

   

Las falsas religiones

   

----------El cristianismo es entre todas las religiones, la más perfecta y eficaz, sin tacha y sin defectos, fundada sobre la pura y total verdad, porque está fundada por el Hijo de Dios. Sin embargo, también las otras religiones, aunque todas en diversos modos contengan errores y vicios, contienen también verdades y buenas leyes, que provienen todas de Cristo y conducen a Cristo y, si son asumidas por personas en buena fe, que sin culpa no conocen a Cristo, conducen en cualquier caso a la salvación.

----------Hablando en general, religión significa culto divino. Puede haber un culto equivocado al verdadero Dios, como en el caso del judaísmo, del islamismo y del protestantismo. Puede también haber cultos a falsos dioses, donde la criatura es confundida con el Creador, como en el politeísmo y la idolatría, en el culto masónico del hombre; en el culto de los espíritus, como el espiritismo; en el culto de los difuntos, como el sintoísmo; en el culto a la madre tierra, como el pachamamismo; en el culto a los animales, como el chamanismo, en el culto a los atros, como la astrología, en el culto a Satanás, como el satanismo.

----------El satanismo, reaparecido con fuerza en la actualidad, puede tener dos formas. Existe un satanismo consciente y un satanismo inconsciente. En uno y en otro caso, el satanista no sirve a Dios, sino al diablo. En el primer caso, lo hace conscientemente, como el adivino, el nigromante, el mago, la bruja, la hechicera; en el segundo, lo hace inconsciente e implícitamente, en cuanto el satanista no cree en la existencia del diablo, sino que lo considera como símbolo de la libertad y de la razón.

----------Por lo tanto, sirve a un falso dios, o sea a sí mismo, como por ejemplo el masón, el agnóstico, el hinduista, el idealista, el teósofo, el hermetista, el gnóstico, el pelagiano, el panteísta o el ateo.

   

El luteranismo debilita la religión a favor de la secularidad

   

----------El papa san Juan Pablo II ha calificado a Martín Lutero como "alma profundamente religiosa". ¿Cómo entender esas palabras? Si por religión entendemos la confianza en Dios, la sed de salvación, y el deseo de imitar a Cristo y de sufrir con Cristo, ciertamente la "theologia crucis" de Lutero puede ser calificada como fuerte expresión religiosa y así se puede hablar de una religión protestante.

----------Debe tenerse presente que el luterano no vincula lo sagrado a particulares lugares o edificios, como lo hace el católico con la iglesia o con el templo. Para el luterano todo el mundo es sagrado y sobre todo el corazón del hombre, donde habita Cristo. Para el católico, en cambio, existe una distinción entre lo sagrado y lo profano, así como en los fieles existe una distinción entre el laico y el religioso.

----------El error de Lutero, precisamente, ha sido el de ignorar estos dos niveles, profano y sagrado, secularizando la vida religiosa y aboliendo el ministerio sagrado del sacerdote. Pero de esta manera, al mismo tiempo Lutero, al considerar que la perfección evangélica se agota en el plano del laicado y de lo profano, ha sacralizado a la vez la orientación laical y ha degradado a lo sacro.

----------Se diría que en el culto luterano Cristo haya venido a la tierra para permanecer en la tierra. Dios está en el mundo, por eso no es necesario dejar el mundo o ir más allá del mundo para llegar a Dios, Lutero reduce la religión a la simple oración, a la comida fraterna y a la confianza de salvarse.

----------En Lutero, la religión es simplemente el acto con el cual el fiel le pide a Dios misericordia y gracia. Pero no proyecta ningún estado religioso que implique una superación ascética de la secularidad y de la laicidad. No es necesario renunciar al matrimonio, a la propiedad privada y a la libertad personal, porque en Lutero falta la perspectiva escatológica de la vida cristiana, que él pone en el exclusivo horizonte de este mundo.

----------De tal manera, la Cena luterana es una simple memoria del pasado de aquí abajo, es el mero recuerdo de un acontecimiento puramente profano, fraterno, laico y secular, sin nada de sacro, de divino, de sobrenatural, de trascendente y de místico, incluso en la presencia de Cristo, pero no es un acontecimiento pascual y escatológico, "pignus futurae gloriae", ya que a causa de la negación del misterio de la transubstanciación, el fiel no come la carne de Cristo, sino sólo del pan. Entonces, nos podemos preguntar: ¿cuál es el propósito de toda esta puesta en escena que hacen los luteranos de la última Cena? También podríamos comer un buen pan y el mejor salame quintero con amigos en un bar o en un fast-food.

----------Otra grave carencia del culto luterano fue, como se sabe, el abandono del culto a los Santos, con la lógica consecuencia de que ya no tiene sentido dedicar una iglesia catedral o parroquial o abacial o de un santuario, o un oratorio o una capilla o un altar a un determinado Santo, incluso si fuera la Virgen.

----------El protestantismo ha contrapuesto religión y fe, entendiendo por religión una presuntuosa y arrogante ascensión del hombre hacia Dios, mientras que la fe se entiende como descenso de la gracia sobre el hombre. Pero esta es una falsa distinción, porque en realidad la religión cristiana no es más que una puesta en práctica de la fe cristiana y para nada sirve la fe si no es practicada en las obras de la religión.

----------Aunque en muchos casos los lugares del culto protestante son cedidos por ex-iglesias católicas o se ha mantenido la estructura arquitectónica tradicional de la iglesia, de hecho, en los templos protestantes sólo tenemos en sustancia simples y profanas salas de reuniones, como pueden serlo cualquier aula de escuela o las sedes de un partido político o de una asociación cultural o barrial o vecinal.

----------Lutero pretende sustituir la religión (exterior) con la fe (interior), ignorando la virtud de la religión como obra de la razón práctica. La fe está ciertamente en el origen del culto divino sobrenatural. Pero la gracia supone la naturaleza y no la sustituye. El cristiano mantiene la naturaleza humana y el culto cristiano supone esta base natural, la purifica, la corrige y la eleva al orden de lo divino.

----------Otra carencia de la religiosidad protestante consiste en el pretender recibir la misericordia divina por medio de la sola fe-confianza y confiando haberla recibido, incluso sin arrepentimiento y prescindiendo de las obras penitenciales y de reparación. Por el contrario, en el catolicismo ha habido casos de penitentes adinerados que han hecho construir iglesias en reparación de los propios pecados.

----------Hay que tener en cuenta que, heabiendo abolido Lutero el sacrificio de la Misa, ya no hay razón para hablar de templo. El templo es sustituido por el salón de la comunidad, en la cual la comunidad se reúne para la lectura de la Escritura, la conmemoración de la Cena del Señor y la oración. Solo eso.

----------Vale por lo demás recordar que Lutero también suprime el sacrificio entendido como acción sagrada en honor de Dios o para obtener la gracia de Dios. No existe, por lo tanto, tampoco el sacerdocio como sacramento que habilita a un creyente y lo distingue de otros creyentes, para ofrecer el sacrificio de la Misa.

----------La oración, para Lutero, no es búsqueda o petición de gracia, sino acción de gracias y aceptación de la gracia ya recibida. No es obra del hombre hacia Dios, sino respuesta del hombre al obrar de Dios. La oración no expresa una necesidad, sino que es la toma de conciencia del perdón y de la misericordia ya recibidos. No es el hombre que habla con el Padre, sino que es Cristo en el hombre que habla con el Padre.

----------Ciertamente el luterano también elige o construye sus lugares de oración, de convocatoria o de reunión de la comunidad. Pero para él estos lugares no están determinados porque en ellos se haya dado o se espere una especial teofanía, sino por razones puramente logísticas o prácticas, ya que, habiendo formado una comunidad cristiana, es necesario establecer un lugar, un edificio o una sala para las reuniones, a fin de satisfacer a su necesidad y a su deber de conmemorar la Cena del Señor.

----------Llegados a este punto, ya al final de nuestra reflexión, es bueno recordar que la reforma litúrgica promovida por el Concilio Vaticano II está claramente inspirada en la perspectiva ecuménica de acoger cuanto de válido existe en el ritualismo luterano: la importancia de la proclamación de la Palabra, el reunirse en la presencia de Cristo, el sacerdocio común de los fieles, los ministerios femeninos, el ministro como presidente de la asamblea, la profecía del banquete escatológico, la lengua vernácula.

----------Las dos guerras mundiales del siglo pasado han mostrado en qué se convierte la humanidad cuando la religión se debilita, pero me temo que muchos no han aprendido la lección, porque todavía están apegados a esas ideas antirreligiosas o irreligiosas, que han estado en la base de aquellos enormes conflictos del siglo pasado. El Concilio Vaticano II ha querido ser, esta vez, un recordatorio sereno y argumentado de la importancia de la religión. Con la bondad o con la severidad, el Señor no deja de llamarnos a todos a Sí, a abandonar el camino de la mentira y del odio y a abrazar el camino de la verdad y de la paz.