sábado, 8 de agosto de 2020

Notas sueltas en la Novena de la Asunción (3/9)

Frecuentemente los calendarios medioevales nos informan que el Sol está en la constelación de Virgo el día 15 de Agosto. Me pregunto si alguna vez alguien ha sugerido que este fenómeno astronómico tiene algo que ver con la elección de ese día para celebrar la Asunción de María Santísima en cuerpo y alma a los Cielos. He allí una pequeña pero interesante cuestión para los historiadores de la Liturgia.
   
----------Me pregunto también otra cosa: ¿qué colección de himnos, antífonas y lecturas litúrgicas es la que debe preferirse, de todas las que se han dado en la historia?... Tengo un problema personal para responder a esta pregunta: no soy yo precisamente un buen conocedor de todas las colecciones. Además, tengo una básica tendencia a dudar de las intenciones del autor de las colecciones para esta Fiesta de la Asunción; pues todo el tiempo me da la sensación de que -y sólo lo digo de modo general- el escritor liturgista está mirando a hurtadillas, por encima del hombro, temiendo que pueda ser considerado demasiado extremo, o podríamos decir, si me lo permiten, excesivamente "mariólatra", como suelen acusar a los católicos algunas confesiones protestantes. Ciertamente, la composición del venerable papa Pío XII, en su reforma, es buena (y ayer hubo un apreciado comentarista que también lo dijo en nuestro foro), aunque no me entusiasman demasiado las elecciones que hizo Pacelli para su composición, porque las composiciones más antiguas que reemplazó son, en mi opinión (y al menos en lo que yo conozco) extremadamente buenas.
----------"Veneranda nobis Domine huius est diei festivitas, in qua Sancta Dei Genetrix mortem subiit temporalem, nec tamen mortis nexibus deprimi potuit quae filium tuum Dominum nostrum de se genuit incarnatum. [...] Famulorum tuorum, quaesumus, Domine, delictis ignoxsce: ut, qui tibi placere de actibus nostris non valemus; Genetricis Filii tui Domini nostri intercessione salvemur". No veo cómo nadie cuyos afectos se excitan y emocionan al recitar la antigua oración colecta Veneranda, o al leer las enseñanzas de san Juan Damasceno, o al comprender las explicitaciones de la Liturgia Bizantina acerca de la completa glorificación de María, de María en su plenitud, cómo puede no gustarle la colección de oraciones hecha por Pío XII... no veo, digo, como no pueda gustarle por razones doctrinales. Pero... la cuestión es que la "doctrina" mínimamente concebida (o debiera yo decir minimalísticamente concebida) no agota el contenido de la Tradición.
----------Quizás podría ser un poco más claro en mis expresiones, si digo que mis propias dudas sobre las características (o podríamos decir, sobre el acento) de la definición de 1950, en la constitución apostólica Munificentissimus Deus, no se refieren a lo que Pío XII dijo en ella, a lo que, por supuesto, suscribo alegre y fervorosamente ex animo, sino: 1°) a lo que, al no decir, parecía implicar que podría olvidarse, como el común edificio de tradicionales leyendas que informaron la piedad y el arte en Oriente y Occidente durante siglos y sobre las que tantos Santos hablaron con gran simpatía, como por ejemplo el santo cardenal John Henry Newman, por mencionar uno eminente; y 2°) al hecho de la mediación de todas las gracias de Nuestra Señora. Es un hecho que esa mediación universal de María fue más clara en las antiguas tradiciones de Oriente y Occidente, y que recientemente en Occidente es una verdad que se ha visto eclipsada por la preocupación por la idea, verdadera en sí misma, de que la Asunción de María Santísima en cuerpo y alma al cielo es la consecuencia lógica de su preservación de todo pecado, i.e. de su Inmaculada Concepción.
----------Respecto a esto segundo, es buena esta ocasión para decir (y repetir cuantas veces sea necesario) que María Santísima, en la historia, media todas las gracias a la humanidad al dar a luz al Redentor del hombre. Por ende, su Asunción significa que lo que ella fue en la historia es ontológicamente y por toda la eternidad. Es que en ella, función y ser, historia y ontología, están fusionados.
----------En suma, lo que quiero decir es que personalmente me sentiría más contento con los textos litúrgicos de 1951 si pudieran complementarse con una definición de Nuestra Señora como Mediadora de todas las Gracias. ¡Y esa definición podría ser expresada (es sólo una humilde sugerencia) en el elegante griego con el que san Gregorio Palamas explicó esta verdad! Pero, el caso ha sido que... el venerable Pío XII, pese a toda su devoción mariana (incuestionable en otros aspectos, aunque no en este), parece haber sido bastante tibio hacia la doctrina o el concepto de María Mediadora Universal, bastante poco sensible hacia la idea de la Mediación Universal de Nuestra Señora. No está en mi ánimo, lo repito con toda claridad, negar en lo más mínimo el valor doctrinal de la definición dada en la constitución Munificentissimus Deus, pero, en lo personal, me gusta pensar que el dogma de la Asunción de María a los Cielos está tan basado en el dogma de su Inmaculada Concepción como en el de su Mediación Universal hacia nosotros, pobres peregrinos todavía en este valle de lágrimas, y siempre necesitados de su Omnipotencia Suplicante. ¿Qué opinan los lectores?

2 comentarios:

  1. La oración "Veneranda nobis" que cita se atribuye al Papa San Sergio I (S VII) y aparece en varios ritos latinos. Hasta los años '50, por ejemplo, en el Misal Dominicano. Esa oración menciona la muerte de la Virgen y Pío XII evita claramente pronunciarse sobre ello diciendo "terminado el curso de su vida terrenal" para no meter en la definición del dogma la muerte, dormición o cualquier otro concepto.
    Existe una fiesta litúrgica aprobada por Benedicto XV no introducida en el calendario universal, pero sí concedida por la Santa Sede para diversos calendarios particulares y es la de María medianera de todas las gracias. También existe la fiesta litúrgica y la invocación "auxilio de los cristianos".
    Es cierto que todos los misterios marianos están unidos y el uno implica el otro.
    Luego viene la decisión prudencial de proclamarlo o no.

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  2. Chantre ha dicho: "Pío XII evita claramente pronunciarse sobre ello diciendo "terminado el curso de su vida terrenal" para no meter en la definición del dogma la muerte, dormición o cualquier otro concepto."
    Exacto, Chantre, de eso se trata. O como dice el padre Filemón: no hay problemas con lo que Pio XII DICE en la constitución Munificentissimus Deus, sino con lo que NO DICE.
    Y en eso tenemos que ser TRADICIONALISTAS completos, de TODA LA TRADICION, no sólo de lo que está definido, haciendo un buen discernimiento, claro está.
    A esas "leyendas tradicionales" creo que hace referencia Fr Filemón, acerca de la muerte o dormición de la Virgen, que no se oponen a la definición Piana, aunque no están expresadas en ella.
    Mucho me temo que el excesivo "respeto hacia los protestantes" sea anterior a lo sucedido en el Vaticano II...

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