El papa Francisco nos habla de Dante Alighieri (3/3)

Como lo sugiere el papa Francisco, Dante también puede y debe ser considerado, aunque no haya sido sacerdote, y sobre todo mediante la Divina Comedia, temperamento de verdadero y propio guía espiritual para aquellos que quieren reformar la propia vida y reorientarse hacia Dios. [En la imagen, un fragmento de El saludo de Dante a Beatriz, óleo sobre madera de Gabriel Rossetti, en la Galería Nacional de Canadá].

Riqueza de la personalidad de Dante

   

----------La figura de Dante Alighieri presenta una multiplicidad de aspectos, que anticipan el humanismo y la Iglesia de nuestros días. A buen derecho y con toda razón se le considera un profeta, en términos humanos. Porque es el precursor de una nueva era de la Iglesia, una era que está ya destinada a no tener ocaso: Iglesia que contempla, junto a la figura del teólogo sacerdote, también al teólogo laico.

----------En efecto, la cultura filosófica y teológica de Dante, de evidente impronta tomista, es sorprendente en un laico del medioevo, al cual no le era permitido acceder a esos estudios académicos, que en cambio estaban prescritos para la formación del clero y sobre todo para obtener la habilitación para enseñar teología.

----------Por lo tanto, evidentemente Dante, excepcionalmente dotado para la filosofía y la teología, debió haber podido procurarse por sí mismo esa alta preparación doctrinal, de la cual da prueba en sus obras, una formación que él ciertamente se ha procurado gracias a su amistad y frecuentación del convento dominicano florentino de Santa Maria Novella, por entonces un prestigioso centro de cultura teológica.

----------Dante es también aquel que, con el uso literario de la lengua italiana y conservando al mismo tiempo la lengua latina, inaugura la doble conciencia del propio ser italiano y del propio ser europeo. Dante mantiene el concepto del Imperio romano junto a la conciencia de su propia italianidad étnico-cultural, la cual, sin embargo, como sabemos, sólo llegó a expresarse en unitaria entidad política en 1860.

----------Dante también se encuentra en el umbral de la crisis de la Europa unida bajo el Papa y el Emperador, crisis que habría de ser provocada primero por el cisma de Occidente en el siglo XIV y después, aún peor, por la Reforma protestante del siglo XVI. Europa, como todos sabemos, habría perdido su unidad política y religiosa, no sólo por la propagación como reguero de pólvora de la herejía, sino también por la pérdida entre las diversas naciones, de la conciencia del jus gentium y del derecho romano, que hasta ese entonces las mantenía unidas y por el nacimiento de los variados nacionalismos, que en sí fue cosa buena y normal, pero que se desarrolló en una atmósfera de feroz antagonismo recíproco, no bajo el signo pacífico y armonioso del universalismo jurídico romano, sino de la filosofía irracional, individualista y anárquica de Guillermo de Ockham.

----------Europa emprendería a partir de entonces un camino al fondo del cual habría de renacer el paganismo y la barbarie, y al final la destrucción y la muerte, como lo testimonian las dos terribles guerras mundiales del siglo XX. Fue con la lección de esta inmensa tragedia, que los pueblos de Europa decidieron sabiamente recuperar esa fraternidad universal basada en la razón natural, en el derecho natural y en el jus gentium, reconociendo al mismo tiempo a la Iglesia el derecho de existir y de enseñar su propia doctrina.

----------Es cierto que surge en el siglo XVIII, por obra de la masonería, ese intento de los iluministas, que se basaban en la moral kantiana, de reconstruir la unidad política y cultural europea sobre la base de la simple razón. Pero como ellos pretendían construir esta cultura común contra la Iglesia juzgada divisiva, fautora de oscurantismo, fanatismo y superstición, no hicieron nada en absoluto por el bien de Europa, sino que por el contrario, después de haber desencadenado la Revolución Francesa, sembraron las semillas de un espíritu revolucionario y subversivo, que condujo primero al comunismo y luego a la dictadura nazi-fascista, con las trágicas consecuencias bélicas que siguieron en el siglo XX.

----------Ciertamente, no se podía pretender de un hombre del medioevo la edificación una democracia europea. Dante no podía imaginar otra cosa más que una unión de soberanos europeos en torno al Emperador. Entre ellos, como era usanza en la época, podrían estar los grandes electores del Emperador. Pero no podemos pedirle a Dante ir más allá, también porque la idea de elecciones políticas europeas era completamente impensable en ese momento, aunque debemos recordar que ya en el De Regimine principum santo Tomás había formulado la doctrina de que el príncipe es el vicem gerens multitudinis.

----------Dante fue gran admirador de las dos Órdenes Religiosas que en su tiempo eran de reciente fundación, los Dominicos y los Franciscanos. Muriendo en Ravenna en 1321, el funeral fue oficiado en la actual iglesia de San Francesco y fue sepultado en el cementerio contiguo al convento. Hoy, como todos saben, las reliquias de Dante reposan en la llamada "tumba de Dante", que es un pequeño templo de sabor pagano hecho construir en 1865 por el entonces gobierno masónico, a tan punto que en 1965 san Paulo VI hizo una donación, al Custodio de la Tumba, de un Crucifijo para ser colocado en el templete, ya que tampoco había ninguno allí. Sin embargo, esto nos dice en qué medida Dante, en su gran apertura mental, en su amplia humanidad, en su fervoroso amor a la patria, haya sabido suscitar sobre sí también la estima de la propia masonería.

----------Dante, por tanto, hijo espiritual de san Francesco y santo Domingo, ha sabido comprender los méritos y los límites de entrambos y su recíproca complementariedad. Ha comprendido que esas Órdenes, apenas recién nacidas, estaban revelando a la Iglesia y a la humanidad una energía evangélica que hasta esa época era desconocida, que estaban inaugurando una fase nueva y más avanzada de la animación evangélica de la realidad humana: el pasaje de la actitud de oposición al mundo a la actitud de consagración del mundo, de la actitud de huida del mundo a la actitud de conquista del mundo, de la defensa del mundo a la victoria sobre el mundo, del rechazo del mundo a la evangelización del mundo.

----------En el IV cielo del Paraíso, es santo Tomás de Aquino quien hace las alabanzas a Francisco. Menciona ante todo a Francisco y a Domingo: "El uno, con seráficos ardores; el otro fue en la tierra la sapiencia, que el querube coronó con esplendores. De uno hablaré, pues de ambos la excelencia, el elogio del uno, ambos comprende, que un mismo fin buscaron en conciencia" (Paraíso XI 39-42). "Y para hablar con menos oscureza, el nombre te diré de esos amantes: Francisco el uno, la otra la Pobreza" (75). "Entre el Arno y el Tiber peñascoso, Cristo le impuso su postrer estigma, que dos años llevó cuerpo glorioso" (108). "Y cuando Aquel que de su humilde cima lo levantó, y halló merecedores sus santos hechos de la sacra estima" (111). En cambio, san Buenaventura alaba a Santo Domingo: "Domingo se llamó; y hay que nombrarlo como el cultivador del bien, que Cristo en su viña eligió para ayudarlo" (Paraíso XII,72).

----------Dante muestra una personalidad de gran riqueza: cultivado en las diversas ciencias de su tiempo, filósofo, teólogo, poeta y místico. Padre de familia, pero amante de la soledad y de la contemplación. Anticipó en pleno medioevo la conciencia de la igual dignidad personal entre hombre-mujer y su mutua reciprocidad espiritual, así como la moderna concepción católica del amor entre hombre y mujer.

----------Dante también puede ser considerado, o mejor, debe ser considerado, aunque no haya sido sacerdote, y sobre todo mediante la Divina Comedia, temperamento de verdadero y propio guía y director espiritual para aquellos que quieren reformar la propia vida y reorientarse hacia Dios.

----------Por eso Dante, como bien subraya el papa Francisco en su Carta, ha de ser considerado un gran educador de la juventud, así como un maestro del buen poetar y del buen escribir, fuerte estímulo a la apertura de la mente y del corazón hacia los valores más altos, más sólidos y más universales del humanismo, de la libertad, de la moral, de la sociabilidad, del arte, de la fe y de la espiritualidad. Por eso es excelente que su pensamiento todavía sea enseñado en las escuelas públicas de Italia en la actualidad, y de ello deberían tomar ejemplo otros países como es el caso del nuestro.

----------Dante es gran discípulo de santo Tomás en el educar la razón en el encuentro con la fe; pero es también gran discípulo del Seráfico en la ardiente aspiración a la visión amorosa del rostro de Dios. Al poner a san Bernardo para guiarlo en los últimos pasos hacia la visión de Dios, Dante muestra la correcta estima que tenía de la superioridad de la vida contemplativa sobre la vida activa de las órdenes Franciscana y Dominicana.

   

La exaltación de la dignidad de la mujer

   

----------Un lugar de completa relevancia en la vida de Dante, lo ocupa la figura celestial y misteriosa de Beatriz, figura que con la de santa Lucía, símbolo de la luz de la fe, y de la Virgen, Madre de Dios y mediadora de todas las gracias, forma una espléndida y sublime tríada femenina, que no olvida a las mujeres pecadoras, como por ejemplo Francesca y Taide, sino que las ilumina con la luz de una comprensión de amor, que ve también en ellas la huella, aunque ofuscada por el pecado, de la originaria vocación divina.

----------En cuanto a la propia Beatriz, se trata de una mujer que realmente ha existido, y conocida por Dante con solo nueve años de edad, muerta jovensísima. Dante quedó impresionado por esta criatura angelical, niña purísima, de extraordinaria belleza, en la cual vio un rayo de la luz eterna del paraíso.

----------Fue una experiencia mística extraordinaria, en la cual la feminidad, muy lejos de aparecérsele como entonces se le aparecía ordinariamente, es decir, como una realidad meramente terrenal o incluso como una tentación, se le aparecía indisolublemente unida a la santidad.

----------Por eso Dante no tiene dificultad en ver en la mujer un camino de salvación y de elevación espiritual, sin sentirlo para nada en contraste con el honesto placer sexual, aunque efectivamente apreciaba sin reservas la práctica de la castidad consagrada, en la vida religiosa, a tal punto que él tenía entre los Religiosos, frailes Franciscanos y frailes Dominicos, sus mejores amigos.

----------Al mismo tiempo, Dante tenía muy claro el valor del ideal del matrimonio, tanto que fue esposo de Gemma di Manetto Donati, con quien tuvo cuatro hijos, entre ellos Beatrice, que se hizo monja en el monasterio dominicano de Ravenna, de cuya capilla se conserva aún la fachada.

----------Acerca de la alta estima que Dante tenía por la dignidad de la mujer, el papa Francisco, en su carta apostólica Candor Lucis aeternae, que en este artículo hemos comentado, observa: "la presencia femenina es significativa. Al comienzo del arduo itinerario, Virgilio, el primer guía, conforta y anima a Dante para que siga adelante, porque tres mujeres interceden por él y lo guiarán: María, la Madre de Dios, figura de la caridad; Beatriz, símbolo de la esperanza y santa Lucía, imagen de la fe.

----------Beatriz se presenta con estas conmovedoras palabras: 'Soy Beatriz la que te manda que vayas; / vengo del lugar a donde deseo volver / y es el amor quien me mueve y me hace hablar' (Infierno II, 70-72), afirmando que la única fuente que nos puede dar la salvación es el amor, el amor divino que transfigura el amor humano. Beatriz remite, además, a la intercesión de otra mujer, la Virgen María: 'Una mujer excelsa hay en el cielo que se compadece / de la situación en que está aquel a quien te envío, / y ella mitiga allí todo juicio severo' (94-96). Luego, dirigiéndose a Beatriz, interviene Lucía: 'Beatriz, alabanza de Dios verdadero, / ¿por qué no socorres a quien tanto te amó, / que se alejó por ti de la esfera vulgar?' (103-105)".

----------"San Bernardo, mostrando a los bienaventurados situados en la rosa mística, invita a Dante a contemplar a María, que dio los rasgos humanos al Verbo Encarnado: 'Contempla ahora el rostro que a Cristo / se asemeje más, que sólo su claridad / te puede disponer para ver a Cristo' (Par. XXXII, 85-87). Una vez más se evoca el misterio de la Encarnación por la presencia del arcángel Gabriel. Dante pregunta a san Bernardo: '¿Quién es ese ángel que con tanto gozo / mira a los ojos de nuestra reina, / de tal manera enamorado que parece de fuego?' (103-105); y este responde: 'Él es el que llevó la palma / a María, cuando el Hijo de Dios / quiso cargar con nuestro cuerpo' (112-114).

----------La referencia a María es constante en toda la Divina Comedia. En el camino del Purgatorio, es el modelo de las virtudes que se contraponen a los vicios; es la estrella de la mañana que ayuda a salir de la selva oscura para encaminarse hacia el monte de Dios; es la presencia constante, por medio de su invocación -'el nombre de la bella flor que siempre invoco, / mañana y noche' (Par. XXIII, 88-89)-, que prepara al encuentro con Cristo y con el misterio de Dios".

----------El papa Francisco recuerda la figura que Dante presenta de san Francisco y la recuerda con acentos efectivos, destacando las características del ideal franciscano de pobreza, amor a Jesús Crucificado, austeridad, simplicidad, humildad, fraternidad, amor a la naturaleza, a la Iglesia y a la contemplación.

----------"Y finalmente, en el centro de la última visión, en el encuentro con el misterio de la Santísima Trinidad, Dante distingue precisamente un Rostro humano, el de Cristo, el de la Palabra eterna hecha carne en el seno de María: 'En la profunda y clara substancia / de la alta luz se me aparecieron tres círculos / de tres colores y una dimensión […]. Aquel círculo, / que me parecía en ti como luz reflejada, / cuando con mis ojos la contemplé en torno, / dentro de mí, con su color mismo, / me pareció representada nuestra efigie' (XXXIII, 115-117.127-131). Sólo en la visio Dei se sacia el deseo del hombre y su fatigoso camino termina completamente: 'mi mente iluminada / por un fulgor que satisfizo su deseo. / A la alta fantasía le faltaron aquí las fuerzas' (140-142)".