jueves, 13 de julio de 2023

"Llenad la tierra y sometedla, dominad..." Pero ¿de qué manera? Dominio técnico y dominio mágico de la naturaleza (5/5)

El examen realizado, al comparar la concepción galileana y cartesiana con la bruniana, de la relación del hombre con la naturaleza, nos hace conscientes del hecho que aún hoy, en un mundo que cree saber qué es la ciencia y cuáles pueden ser sus aplicaciones en el campo de la física, de la química, de la biología, de la zoología y de la vida humana, y que cree haber superado ampliamente y puesto en ridículo las antiquísimas pretensiones de la magia, en realidad hoy como nunca antes, como atestigua la concepción del hombre del transhumanismo y del metaverso, la fascinación de la magia continúa alimentando nuestro anhelo de omnipotencia, siempre seducidos como estamos por las promesas de la antigua serpiente edénica. [En la imagen: fragmento de "La Bestia del mar", del Tapiz del Apocalipsis de finales del siglo XIV en Angers, Francia. Detalle con Juan y la Bestia del mar, recibiendo el cetro del Dragón].

Benedicto XVI y el papa Francisco advierten contra el transhumanismo
   
----------El cardenal Joseph Ratzinger, en un recordado discurso a sacerdotes y seminaristas, en Palermo, el 15 de marzo de 2000, advirtió con gran fuerza contra la confianza ilusoria de que la máquina pueda reemplazar al hombre y denunció con horror la perspectiva de reducir al hombre a una máquina: "Las máquinas que han sido construidas imponen esta misma ley, esta misma ley que era adoptada en los campos de concentración. Según la lógica de la máquina, según los maestros de la máquina, el hombre debe ser interpretado por un computer, y esto solamente es posible si el hombre viene traducido en números. La Bestia es un número, un ser, ciertamente, pero un número, y nos transforma en números. Dios nuestro Padre, en cambio, tiene un nombre, y nos llama a cada uno de nosotros por nuestro nombre. Es una persona, y cuando nos mira a cada uno de nosotros, ve una persona, una persona eterna, una persona amada".
----------Posteriormente, en 2005, el papa Benedicto XVI repetía a los cardenales del Consejo para la Pastoral de la Salud que "es necesario cuidarse de los riesgos de una ciencia y de una tecnología que pretenden ser completamente autónomas frente a las normas morales inscritas en la naturaleza del ser humano", mientras que en 2015 -como subraya L'Osservatore Romano en el comentario a la encíclica Laudato Si'- el papa Francisco propone, precisando el discurso de Benedicto XVI, "una ecología integral en cuyo horizonte el ser humano viene investido de la tarea del cuidado integral de lo creado", concepto de aquello que el Papa llama "ecología integral", que consiste en "la plena armonía personal y comunitaria del hombre con la naturaleza, racionalmente utilizada mediante los instrumentos cada vez más avanzados de la técnica para alabanza y gloria de Dios creador y sabio gobernador del mundo".
----------Contamos con noticias de una serie de actos y de contactos mantenidos por el Sumo Pontífice con altos exponentes del transhumanismo, con el fin de valorizar cuanto de positivo puede encontrarse en él para el bien del hombre, mientras que el Santo Padre nos advierte con claridad de los peligros que se ocultan en la asunción integral, acrítica e indiscriminada del concepto y perspectivas del transhumanismo.
----------De hecho, nadie duda de los grandes beneficios y enormes ventajas que la cibernética asegura para el cuidado de la salud física y psíquica, en la medicina y en la cirugía, para el buen funcionamiento del sistema neurovegetativo, así como para la fisiología del cerebro, como para el desarrollo y el perfeccionamiento de la tecnología en todas sus variadísimas formas y aplicaciones, para las perspectivas de la industria y de la ingeniería, de las comunicaciones y de los medios de transporte, de la exploración del espacio, de la investigación acerca de los constitutivos elementales de la sustancia material, para el dominio y para la explotación racional de las fuerzas de la naturaleza.
----------Es obvio que la Iglesia, teniendo como tarea primordial el cuidado de la salud espiritual del hombre, a la luz de la divina revelación, no puede en modo alguno desinteresarse, aunque indirectamente y dejando a los especialistas competentes su legítimo espacio de acción y de decisión, también por la salud física de una creatura como la humana, la cual, por voluntad de su creador, en sí misma y en sus relaciones con la naturaleza, no puede dejar de ejercer convenientemente su vida espiritual y moral, sino sobre la base de un conveniente bienestar físico proveniente de un correcto cuidado del cuerpo y del buen gobierno y ordenamiento de la naturaleza, disciplina esta, hoy llamada "ecología", considerando el hecho de que según la revelación cristiana la condición escatológica del hombre y de la mujer prevé el habitar en un futuro universo físico no ya en conflicto con el hombre, sino por el contrario sometido de nuevo al hombre, según el plan divino originario prospectado por la Sagrada Escritura en la vida edénica.
----------A la luz de estos principios, el papa Francisco, además de iluminarnos con sus enseñanzas, nos ha mostrado una gran laboriosidad a fin de afrontar y resolver de modo fructífero, sorteando los peligros, esta delicadísima problemática, también con una serie de encuentros y contactos de alto nivel, personalmente o mediante los organismos de la Santa Sede, con figuras de primer plano de la escena internacional y máximos exponentes del pensamiento transhumanista y del así llamado "metaverso".
----------El papa Francisco ha realizado una serie de contactos con los máximos responsables a nivel mundial en la salud del planeta y su racional utilización en beneficio de la humanidad. Doy aquí un breve resumen de las acciones del papa Francisco con respecto al tratamiento de esta delicadísima cuestión.
----------En 2016 el Romano Pontífice trató en una audiencia con Mark Elliot Zuckerberg, promotor del así llamado "metaverso", el cual consiste en un proyecto de humanización de la naturaleza mediante la telemática. La conocida enciclopedia Wikipedia, bajo la entrada "metaverso", nos ayuda a entender de qué se trata. Esencialmente es una visión del mundo físico y de la perspectiva de operar sobre él sobre una base idealista, es decir, el proyecto de homologación, en base del principio de Berkeley esse est percipi y mediante el uso de la cibernética, de la realidad física objetiva, independiente de nuestra mente, con una realidad llamada "virtual", que es la reproducción cibernética habilísima de la primera, de modo que puede ser manipulada de modo creativo e ilusorio para darnos la impresión de experimentar la realidad en sí tal como existe fuera de nosotros. Este programa de refundación del contacto sensible con la realidad mediante la cibernética tendría como objetivo sustituir la realidad externa por una reconstrucción cibernética de la misma realidad, de modo tal que el sujeto ya no vive en la realidad sino en una falsa realidad construida por la máquina. De ahí a imaginar una perspectiva de dominio mágico sobre la naturaleza no hay mucha distancia.
----------En 2018, el Papa recibió la conspicua beneficencia de quince millones de dólares para tres asociaciones católicas por parte de Jeff Bezos, de Amazon, quien ha invertido tres mil millones de dólares en una empresa transhumanista sobre las biotecnologías para incrementar la duración de la vida.
----------En 2019, la Santa Sede promovió una conferencia sobre el tema "ética y robótica", con la firma al año siguiente con las empresas IBM y Microsoft, de la Carta ética sobre la inteligencia artificial, mientras que el Papa ha definido como "un don de Dios" la tecnología que puebla la galaxia digital.
----------En 2020, la Santa Sede ingresó en el Consejo para el capitalismo inclusivo, en el cual también figuran la Fundación Rockefeller (el banquero David fundó el Club Bilderberg) y la heredera bancaria Lynn Forester de Rothschild. Ese mismo año, por primera vez, un Papa intervino en Davos en el Forum Económico Mundial enviando un mensaje directamente a Klaus Schwab, el líder del transhumanismo y de la Cuarta Revolución Industrial en la fusión de lo físico con lo biológico y lo digital, es decir, el cyborg, y auspició: "que vuestras deliberaciones conduzcan a un crecimiento de la solidaridad, especialmente con los más necesitados, que sufren injusticia social y económica y cuya misma existencia está incluso amenazada".
----------En 2021 nació en el Estado Vaticano la Fundación renAIssance, término que viene del inglés renacimiento, donde AI significa Inteligencia Artificial y, en el Colegio Alemán del Vaticano, se llevó a cabo el encuentro titulado "El código para el metaverso: programar nuestro futuro para siempre", siendo relatores los autores del libro El Código del Metaverso.
----------Finalmente, el año pasado 2022, el magnate de Neuralink y Starlink también se reunió con el Santo Padre, ese Elon Musk promotor del microchip instalado en el cerebro humano, un dispositivo electrónico cuya finalidad es activar las funciones cerebrales.
----------En fin, es importante el Discurso pronunciado por el Papa a la Sociedad Max Planck el pasado 23 de febrero: "El anuncio del inminente nacimiento del llamado 'pensamiento híbrido', resultante de la hibridación del pensamiento biológico y del no biológico, que permitiría al hombre no ser suplantado por la Inteligencia Artificial, plantea interrogantes de gran relevancia tanto en el plano ético como sobre lo social".
----------La fusión entre la capacidad cognitiva del hombre y el poder computacional de la máquina modificaría en modo sustancial la especie homo "sapiens". De ahí el grito de alarma del Papa, según el cual "no podemos entonces dejar de plantearnos el problema del sentido último, es decir, de la dirección, de cuanto está sucediendo ante nuestros ojos. […] Si para quienes se reconocen en el proyecto transhumanista todo esto no causa preocupación, no puede decirse lo mismo de quienes en cambio se dedican a hacer avanzar el proyecto neo-humanista, según el cual no puede ser aceptada la brecha entre la acción y la inteligencia […] Si se separa la capacidad de resolver problemas de la necesidad de ser inteligentes al hacerlo, lo que se anula es la intencionalidad y por tanto la eticidad del actuar".
----------Finalmente, en el texto, el Papa estigmatiza la propagación, "en los ambientes de la gran ciencia, de un principio de responsabilidad 'técnica', que no admite el juicio moral de lo que está bien y mal. El actuar, especialmente de las grandes organizaciones, debería evaluarse sólo en términos funcionales, como si todo lo que es posible fuera, por ello, éticamente lícito. […] La Iglesia nunca podrá aceptar una posición de ese tipo, de cuyas trágicas consecuencias ya hemos tenido demasiadas pruebas".
----------He aquí entonces la advertencia final del papa Francisco: "Es ante todo la responsabilidad sobre como tomar cuidado del otro, y no sólo como dar cuenta de lo que uno ha hecho, lo que hoy debemos volver a poner en el centro de nuestra cultura. Porque se es responsable no sólo de lo que se hace, sino también y sobre todo de lo que no se hace, aunque se lo pueda hacer".
   
Conclusión
   
----------El examen que hemos hecho al comparar la concepción galileana con la bruniana de la relación del hombre con la naturaleza nos hace conscientes del hecho que aún hoy, en un mundo que cree saber qué es la ciencia y cuáles pueden ser sus aplicaciones en el campo de la física, de la química, de la biología, de la zoología y de la vida humana, y que cree haber superado ampliamente y puesto en ridículo las antiquísimas pretensiones de la magia, en realidad hoy como nunca antes, como atestigua la concepción del hombre del transhumanismo y del metaverso, la fascinación de la magia continúa alimentando nuestro anhelo de omnipotencia, siempre seducidos como estamos por las promesas de la serpiente antigua, no obstante la cotidiana experiencia de los límites y de las insuficiencias de nuestros aparatos técnicos y operativos más avanzados y sofisticados, como testimonia la tragedia de tres años de la pandemia a la que ha sido sometida toda la humanidad, llamado divino a la humildad ante Dios, que muchos de nosotros todavía nos negamos a practicar, no obstante esta terrible lección divina que tenía la finalidad de llevarnos a la toma de conciencia de nuestros errores y al sentido de nuestros límites, al arrepentimiento de nuestros pecados y a un retorno a la obediencia a las leyes divinas en la regulación de nuestra conducta moral y nuestro dominio sobre la naturaleza.
----------Hemos visto cómo el enfoque cartesiano del dominio sobre la naturaleza, si por un lado coincidiendo con el método galileano, nos ofrece una visión de la naturaleza y de la operatividad humana conforme a la voluntad de Dios y al ordenamiento puesto por Dios de lo que debe ser el dominio del hombre sobre la naturaleza, por el otro, el cogito cartesiano (y aquí me refiero a estudios sobre Descartes que vengo haciendo desde hace décadas) asigna a nuestro yo una tarea de tal modo exorbitante en la fundación de la ciencia y de la misma realidad, que, como han demostrado las explicaciones radicales del significado del cogito de Kant a Fichte a Hegel a Marx a Gentile a Husserl a Heidegger a Nietzsche, aunque el mismo Descartes haya sido sin duda católico, sobre los hombros de este yo viene, en el fin de esta explicitación dictada por las leyes inexorables de la lógica, a gravar toda la responsabilidad por el origen mismo de la realidad, responsabilidad que compete a Dios y no al hombre, por lo cual el resultado final de esta operación que ha durado tres siglos, ha sido por explícita declaración de sus autores o la sustitución de Dios por el hombre, y hemos tenido el ateísmo, o la identificación del hombre con Dios, y hemos tenido el panteísmo.
----------Es muy cierto que ya en 1737 la obra del jesuita Jean Hardouin, que había acusado a Descartes de criptoateísmo, fue incluída en el Índice. Ciertamente el ateísmo no se deriva directamente de Descartes y no está inmediatamente ocultado en su teología, la cual admite con claridad la existencia de Dios, se esfuerza por dar pruebas de ella, aunque insuficientes, y se extiende en ilustrar los atributos divinos y el poder de Dios sobre el hombre y sobre la naturaleza.
----------Pero al ojo atento, que no se deja engañar por las bellas fachadas, ojo atento y astuto como fue el de los idealistas alemanes, no escapan en absoluto las ilimitadas aperturas que ofrece el yo cartesiano, por lo cual ellos lentamente, paso a paso, pasándose los unos a los otros la posta, con la tenacidad, la constancia típica y la consecuencialidad lógica de los alemanes, a lo largo del siglo pasado, sobre todo con Giovanni Gentile y Martin Heidegger, mostraron a la luz de el sol las consecuencias extremas del yo cartesiano.
----------Al mismo tiempo, todas las aspiraciones del antiguo panteísmo, del antiguo gnosticismo, del antiguo materialismo y de la antigua magia, renacieron tan frescos como si hubieran aparecido por primera vez y como si las infinitas tragedias de la historia pasada no hubieran enseñado nada acerca de las nefastas consecuencias de la aplicación de esas ideas.
----------Y hoy estamos en este punto. Por eso, si no queremos que la humanidad perezca en un inmenso conflicto nuclear, con esas armas que han sido la aplicación del método galileano combinado con la hybris cartesiana, es absolutamente necesario que abandonemos todo sueño y todo delirio de omnipotencia basado sobre la magia, es necesario que prosigamos con el método galileano, no sin embargo combinado con el yo cartesiano, sino con la filosofía aristotélica elevada y corregida por santo Tomás de Aquino, Doctor Communis Ecclesiae, recomendada por el Concilio Vaticano II.
----------Esta es la vía de salida. Esta es la "salida de emergencia" (como dice Ignazio Silone). Estas son las auténticas perspectivas del hombre. Este es el verdadero progreso. Esta es la verdadera promesa para la humanidad del futuro. Este es el inicio del reino de Dios, esta es la verdadera grandeza del hombre. Esta es la pregustación de la gloria eterna de los hijos de Dios en la Jerusalén celestial.

6 comentarios:

  1. Estimado padre Filemón.
    ¡Excelente artículo! Y podría concluirse diciendo: Game over.
    Me refiero al juego de la salvación. En su artículo se resumen todos los errores de los soberbios revolucionarios que hoy controlan el mundo. Se creen Dios, pero en el momento oportuno el Señor bajará su cresta; el Cordero ya ha vencido a Satanás en la Cruz y condenará definitivamente a todos los anticristos en el Juicio Universal. "El que crea se salvará, el que no crea se condenará".

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    1. Estimado Anónimo,
      usted ha captado muy bien el cuadro que hago de las grandes fuerzas espirituales que están actuando hoy en la humanidad y se ponen en contraste con los discípulos de Cristo. Este choque está descrito en tonos grandiosos y dramáticos por el Apocalipsis y la situación de hoy nos hace pensar que casi hemos llegado a estos tiempos vaticinados por san Juan.
      Cada uno de nosotros está llamado a hacer su elección: por Cristo o por el anticristo. Pero en el fondo todos sabemos que la victoria final será de Cristo, algunos para regocijarse, otros para enfurecerse. En este sentido el anciano Simeón, contemplando al Niño Jesús, lo define como signo de contradicción, para que sean revelados los secretos de muchos corazones.

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  2. Estimado padre Filemón,
    he terminado de leer (o mejor dicho, de disfrutar) su riquísimo ensayo sobre la relación entre las actitudes teóricas y prácticas de Galileo, Bruno y Descartes, con el énfasis puesto en delimitar con gran precisión los contornos del pensamiento mágico.
    Creo que su exposición ha sido extremadamente clara y estoy profundamente agradecido por esta contribución a todos sus lectores.
    Ahora bien, usted insiste, correctamente, en el desarrollo del pensamiento mágico a nivel de los intelectuales del Renacimiento italiano. El Renacimiento italiano ha sido también un renacimiento del pensamiento mágico, esta vez al nivel de los exponentes de la intelectualidad de esa época y de los siglos posteriores.
    Ahora bien, ciertamente puedo estar equivocado, pero creo que un buen complemento a su exposición, para que no se caiga en el error de creer que la magia es una cuestión de intelectuales y filósofos, sea considerar el modo en el cual la magia ha venido acompañando todas las culturas humanas, en particular a la cultura cristiana y, en modo particular, a la cultura de la Edad Media.
    En las dos Reformas (es decir, la de Lutero y la de Roma), encontramos dos esfuerzos por recristianizar Europa, después de siglos en los que la fe cristiana convivía fuertemente con una mentalidad mágica. De ello ha proporcionado una gran cantidad de evidencias la historia sociológica y psicológica del Medioevo. Y en tal sentido, debemos estar advertidos de una especie de "leyenda" que se ha tejido sobre el Medioevo, como vértice de la fe y de la cultura cristianas. Esto podría haber sido cierto a nivel de la filosofía y de la teología (Santo Tomás de Aquino es el paradigma más completo), y del alto clero (y con muchas restricciones, especialmente el clero regular), pero a nivel del clero secular, del bajo clero, y del pueblo cristiano, la mentalidad mágica era atroz.
    Considero que tomar en cuenta este aspecto de la mentalidad mágica que convivía con la fe cristiana en el pueblo cristiano aún en los presuntos siglos dorados de la Edad Media, sería un buen complemento a su clarísima exposición sobre el pensamiento mágico, que ayuda a comprender su encanto, una fascinación a la que han sucumbido incluso los siglos que algunos presentan como los siglos del "non plus ultra" de la fe cristiana.

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    1. Estimado Mauro,
      que durante el Medioevo hayan existido personajes dedicados a la magia, no lo pongo en duda. Este fenómeno estuvo presente sobre todo en los cabalistas. Sin embargo, aunque yo he estado interesado en la filosofía medieval durante casi cincuenta años, nunca he encontrado, ni siquiera de historiadores no católicos, una abundancia de noticias sobre prácticas mágicas.
      Su esperanza de que la magia medieval sea mejor conocida me ha dejado un poco perplejo. Lo que me parece deseable es un conocimiento profundo de las prácticas que encontramos en muchos países del mundo.
      Por cuanto respecta al Medioevo, mi temor es que, dada la notoria hostilidad de tanto pensamiento laicista e iluminista hacia la Edad Media, un mayor evidenciamiento de las prácticas mágicas de aquella época pueda contribuir a su difamación.
      En su opinión, ¿de qué podría servir poner en mayor luz a la magia medieval? ¿Podría favorecer la comprensión de la magia en sus formas modernas en la cultura actual de todo el mundo?

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    2. Estimado padre Filemón,
      esta vez no puedo estar de acuerdo con los términos de su comentario, que me ha dejado algo perplejo.
      1) Yo no me refería a "personajes dedicados a la magia durante el Medioevo", sino a un modo de pensar mágico, muy extendido entre el pueblo medieval, entrelazado con su fe cristiana.
      2) ¿Por qué motivo sería deseable hoy en día "un conocimiento profundo de las prácticas que encontramos hoy en tantos países del mundo", y no deseable el conocimiento del modo de pensar mágico y de las prácticas mágicas populares del Medioevo?
      3) El hecho de que los enemigos de la Iglesia puedan eventualmente usar el conocimiento histórico para difamar a la Iglesia no debería impedir futuras indagaciones sobre la historia de la Iglesia.
      4) Sus últimas preguntas son las que más me sorprendieron en su comentario. a) A la primera: cuestionar la utilidad del conocer la historia del pensamiento mágico popular en el Medioevo me parece que equivale a cuestionar la utilidad de la historia en general. El hecho de que la historia esté en el primer grado de abstracción y no tenga la sublimidad del conocimiento metafísico no significa que no sea, a su manera, ciencia. b) A la segunda: el conocimiento del pensamiento mágico popular del Medioevo podría servir para comprender el pensamiento mágico popular actual y, sobre todo, podría servir para saber cómo actuó la Iglesia en la Edad Media ante este problema, para saber cómo debería actuar ahora, aprovechando errores y virtudes.

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    3. Estimado Mauro,
      lamento lo que usted me dice. No esperaba en absoluto haberle contrariado. Pero estoy seguro de que ahora sin más aclararemos las cosas. Tomo en cuenta sus cuatro puntos:
      1) Respecto a la importancia del modo de pensar mágico en el Medioevo, puedo admitir tener una laguna en mis conocimientos respecto a este campo. Por otra parte, yo he comenzado a interesarme por la filosofía medieval a partir de la década de 1960. He leído los estudios de numerosos historiadores del Medioevo. Una gran autoridad en este campo, como usted sabrá, es Gilson, quien, que yo sepa, nunca habla de "prácticas mágicas" en el Medioevo.
      Sin embargo, dado que usted le da importancia a este fenómeno y me cita como gran estudioso a Delumeau, le pido si pudiera referirme algo de sus tesis.
      ¿O acaso usted considera que aún hoy en día encontramos modos de pensar mágico, que han venido desde la Edad Media hasta nuestros días?
      2) Me parece que el motivo sea bastante simple, a saber, la necesidad de que nosotros, como operarios del Evangelio, para poder ejercer una influencia concreta en las personas, conozcamos en este caso específico el modo de pensar mágico que se difunde hoy.
      Además, en este sentido, considero que sea bueno distinguir una magia culta de una magia popular. Al tratar de la magia, reconozco que me he detenido en una forma de magia culta, que surge de la filosofía, como, por ejemplo, comienza en el siglo XV con Pico della Mirandola y Marsilio Ficino.
      Por otra parte, si he entendido bien, usted tiene un interés particular por la magia popular. Confieso ser ignorante en este campo, porque como teólogo he preferido ahondar en la magia culta, que hace referencia al hermetismo, a Jámblico y a Proclo.
      3) Lo que he querido decir es que la divulgación de noticias que no hacen honor a los católicos medievales puede ser utilizada por enemigos de la Iglesia para denigrarla. Al mismo tiempo, así como los católicos sabemos que la Iglesia triunfará sobre las fuerzas del mal, es cierto que, como usted me hace presente, nada tenemos que temer en ser sinceros en reconocer nuestras faltas, que ciertamente no son faltas de la Iglesia, sino defectos y pecados nuestros, de los católicos, que no siempre vivimos en plenitud nuestra fe, sino que cedemos a las lisonjas del mundo y por lo tanto damos un contra-testimonio. Me refiero precisamente a la magia popular medieval, de la cual usted está hablando.
      4a) Me cuido bien de no negar el valor de las ciencias históricas. Incluso tengo previsto un artículo en el que recordaré los grandes méritos de grandes pensadores que, a la luz de la historia sagrada narrada por la Biblia, han elaborado los principios de lo que hoy se llama la teología o filosofía de la historia.
      Aquí podría limitarme a mencionar los nombres de san Agustín de Hipona, Joaquín de Fiore y Gian Battista Vico, quienes le dieron a Hegel la ocasión de elaborar su filosofía de la historia, lamentablemente con una impronta panteísta.
      La idea de Hegel fue retomada y purificada por Maritain con su importante obra "Por una filosofía de la historia".
      4b) Ya he dicho que el estudio de la magia medieval puede darnos a conocer las raíces históricas de la actual magia popular difundida hoy en el mundo.
      Sin embargo, insisto en considerar que sea más interesante el estudio de la magia docta o culta del humanismo florentino, porque es allí donde encontramos las raíces filosóficas, gnósticas, herméticas, teúrgicas, cabalísticas de la corriente transhumanista actual.
      Por cuanto respecta a lo que hacía la Iglesia en la Edad Media para la represión de las prácticas mágicas y queriendo hacer una comparación con la acción pastoral actual, tengo la impresión de que, en línea de principio, había más vigilancia en los Pastores que hoy.
      La magia en la Edad Media estaba afectada al título de herejía. Y en efecto existe una razón, que viene dada por el hecho de que la magia supone una concepción del hombre dotado de poderes divinos, que es evidentemente herética.

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