Grigori Rasputin y el peligro de los Rasputin católicos (2/2)

Para examinar autorizadamente un caso como el sucedido con Rasputin habría sido necesaria una investigación que solo la Sede Apostólica romana habría podido afrontar y conducir a buen término con éxito, como se ha verificado en la historia de la Iglesia católica en casos similares. La Iglesia cismática rusa se vale indudablemente del discernimiento episcopal, pero como en ella falta la apelación a Roma, que es la Sede que goza de un discernimiento superior y decisivo, basado en el carisma petrino, cuando ocurren casos tan graves como el sucedido con Rasputin, el simple carisma episcopal no es suficiente. [En la imagen: fragmento de una fotografía de la familia Románov, de fecha desconocida].

La misión de Grigori Rasputin

   

----------Todo tuvo inicio, como Rasputin mismo lo relató, por haber tenido una visión de la Virgen de Kazan, protectora de Rusia, que precisamente le dio esta misión profética de salvación y santificación del prójimo. Se puso en contacto con el cercano monasterio de Verothur que custodiaba las reliquias de San Simeón, al cual permaneció devoto durante toda su vida. Decidió así emprender una severa vida ascética obedeciendo a un impulso interior por el cual se sintió llevado a la misión de padre espiritual, llamado staretz por los Rusos. Se dedicó al estudio de la Escritura y de la vida de los Santos rusos, a ásperas penitencias, a largas oraciones en la soledad, a la frecuentación de los oficios religiosos y a las peregrinaciones.

----------Así decidió ir a los centros de la vida rusa para predicar allí mismo el Evangelio y llevar a cabo su misión profética. Llegó a las ciudades de Moscú y San Petersburgo, se convirtió en un guía apreciado y un sabio consejero espiritual, con una notable capacidad para intuir la situación interior de las personas, siendo capaz de consolarlas, iluminarlas y darles buenos consejos.

----------Pero Rasputin, al igual que Lutero, sintió una fortísima presión de las pasiones de la lujuria y de la gula, y constató su impotencia para vencerlas. Sin embargo, a diferencia de Lutero que dio escasísima importancia al arrepentimiento, seguro como estaba de estar en gracia, Rasputin recogió en cambio la tradición rusa de los fortísimos arrepentimientos, que sin embargo se resolvían en la nada de hecho, porque Rasputín, como Lutero, estaba convencido de que Dios lo cubría todo benignamente.

----------Rasputin no excluía el arrepentimiento y la confesión del pecado, pero considerándolo invencible a la manera de Lutero, elevaba la reincidencia al nivel de la virtud como expresión de la confianza en la misericordia divina, exactamente como hacía Lutero.

----------De modo similar a Lutero, a diferencia de nuestros místicos modernistas debiluchos, psicoanalistas y hechos de pastafrolla o de gelatina, Rasputin era perfectamente consciente de la acción de Satanás en nuestra vida y del hecho de que Dios también se sirve de él para purificarnos y hacernos santos. Solo que malinterpretó completamente, como Lutero, este rol del demonio, de modo que interpretaba las sugestiones del demonio como la voluntad misma de Dios. Así fue como Lutero en su propia confesión, dijo que había sido el demonio quien lo convenció de no decir más la Misa. El problema entonces no era elegir por Dios contra Satanás, sino el ver en Satanás mismo, creatura de Dios, al mediador de Dios.

----------Hay una diferencia entre Lutero y Rasputin en el tema de las mujeres: que mientras Lutero, encerrado en una visión puramente terreno-procreativa enjaulada en las consecuencias irremediables del pecado original, rechazaba la virginidad como imposible y antinatural, Rasputin hacía lo mismo, pero lo hacía como heredero de la espiritualidad rusa de sello fuertemente escatológico y apocalíptico, que produce un optimismo en el amor entre varón y mujer que Lutero no conocía.

----------Este era el error de los Jhlisty: creer posible ahora esa unión entre varón y mujer que será posible solo en la futura resurrección. Esta corriente optimista-apocalíptica de la espiritualidad rusa se ve acompañada por la corriente dualista sexofóbica platónica-orgenista que encuentra expresión en el monte Athos. Así se explica que habiendo Rasputin hecho una visita al monte Athos, recibió una pésima impresión. Había entendido que el varón no puede estar sin la mujer, pero lo había entendido de la manera equivocada de los Jhlisty.

----------No obstante estos libertinajes, Rasputin recibió regulares funerales religiosos y un regular entierro eclesiástico. Pero durante la Revolución su tumba fue profanada y el cuerpo quemado. Aún así, en el lugar donde sus cenizas fueron dispersas existe una cruz con su foto e imágenes sagradas, meta de peregrinaciones. Aquí tenemos la medida de la diferencia entre el misticismo ruso y el católico. Esta es la paradoja del misticismo ruso: pone a Rasputin junto al Monte Athos, a Freud con Orígenes.

----------Rasputin, al llegar a los ambientes moscovitas, suscitó de primeras la admiración de muchos, incluso de almas piadosas y de altos exponentes de la jerarquía eclesiástica, como los Obispos Sergij, Feofan y Germogen, así como de los renombrados y autorizados monjes Iliodoro y Makarij.

----------Rasputín mostró verdaderas dotes de hombre de Dios y de hombre de oración, asceta penitente, padre y consejero espiritual, profundo conocedor de la Escritura, del alma humana y de sus necesidades espirituales, de guía hacia Dios en la oración y en la obediencia a su voluntad.

----------Pero subsecuentemente los admiradores prudentes y honestos, al darse cuenta de la incompatibilidad de la conducta de Rasputin no digo con la santidad y la ascética, sino simplemente con la común dignidad humana, acabaron por oponerse a él fieramente. Pero esto desgraciadamente no abrió los ojos a la pareja imperial y a otros exponentes de la política y de la Iglesia rusa. Esta ceguera puede afectar también a Obispos y pastores cuando falta la luz que proviene de la Iglesia católica. Y hoy, invadidos como estamos por los modernistas, también nosotros los católicos corremos el mismo peligro.

----------El comportamiento excesivamente confidencial de Rasputín con la zarina y la excesiva confianza de esta respuesta, despertó fundadas sospechas de que Rasputín, bajo el color del pacifismo y el horror por la guerra, se haya opuesto a la intervención de Rusia en defensa de Serbia para satisfacer el deseo de la zarina de origen alemán de evitar la guerra con la Alemania beligerante contra Austria y contra Rusia caída en guerra en defensa de Serbia contra la ocupación de Serbia hecha por Austria que la había anexionado al Imperio austrohúngaro.

----------Cabe agregar que el atractivo de la mística rasputiniana está dado por el hecho de que Rasputin poseía dones carismáticos de sanación y de clarividencia o quizás más probablemente poderes diabólicos disociados de los dones santificantes del Espíritu Santo, por lo cual él, en vez de hacer uso de estos dones para la propia salvación y la del prójimo, los usaba para su propia afirmación o al servicio del demonio, a fin de engañar a las almas y empujarlas a la perdición.

----------El Evangelio contempla la posibilidad de fenómenos como este que he dicho. Lo vemos en las siguientes palabras del mismo Cristo: "Muchos me dirán en aquel día: Señor, Señor, ¿acaso no profetizamos en tu Nombre? ¿No expulsamos a los demonios e hicimos muchos milagros en tu Nombre? Entonces yo les manifestaré: Jamás los he conocido; apártense de mí, ustedes, los que hacen el mal" (Mt 7,22-23).

----------La Revolución rusa ha sido indudablemente el castigo divino para una cristiandad y para un régimen político corruptos en cuanto seducidos por la falsa mística de Rasputin. Él con sus artes diabólicas supo engañar a la corona y a la Iglesia rusa, que terminaron por ignorar las instancias de justicia social que surgían del pueblo oprimido y suscitando el desdén y la ira revolucionaria de los socialistas, de los anarquistas y de los comunistas, en parte comprensible, aunque estos tomaron como pretexto el escándalo de los cristianos rusos para desatar su odio contra Dios y contra la religión.

----------No faltan entre nosotros, los argentinos, escenas y escenarios parangonables. Providencialmente existe en nuestro país un Episcopado que ha logrado aprender, tras dramáticos y nefastos errores de décadas pasadas, saber tomar las debidas distancias del poder político de turno; actitud más que necesaria sobre todo cuando en los poderes seculares no faltan hoy signos preocupantes de una falsa mística en política que, de modo similar a como aconteciera con la corona rusa de principios del siglo pasado, parece impulsar a la ceguera ante las instancias de justicia social que reclaman los pueblos.

----------La falsedad del carisma rasputiniano luce evidente si consideramos que él, a diferencia de verdaderos profetas y jefes religiosos y reformadores de las costumbres, como un san Benito, un san Bernardo, un san Francisco, un santo Domingo, una santa Catalina de Siena, un san Ignacio de Loyola, una Chiara Lubić, un Escrivá de Balaguer, un Don Giussani, un Don Alberione, no suscitó ningún movimiento espiritual de renovación y de reforma, sino que, al contrario, creó escándalos, desacreditó la religión, suscitó corrupción moral, contrastes y conflictos en la Iglesia y en la sociedad rusas, sin aportar ningún beneficio ni remedio a las injusticias sociales, y así provocar el derrumbe de la monarquía y dar ocasión al estallido de la revolución comunista, tanto que hizo pronunciar a Kerensky la famosa frase: "si no hubiera habido un Rasputin, no habría habido un Lenin".

----------Rasputin se presentó ante la corte imperial como representante y abogado del pueblo ruso y de sus virtudes cristianas de piedad religiosa, amor al soberano, sentido de la fraternidad y de la justicia. Y la pareja imperial se ilusionó con que él era la voz sabia y dolorosa del pueblo ruso. Pero concretamente Rasputin no hizo nada a fin de que se diera cuerpo a sus proclamas sociales, operando un discernimiento entre los movimientos revolucionarios ateos y las justas instancias de reforma que debían satisfacerse.

----------Debemos tener en cuenta que Rasputin mantiene la concepción bizantina del soberano voz de Dios y del pueblo y de la Iglesia obedientes al soberano voz de Dios. Como muchos de sus contemporáneos, Rasputin no supo captar el mensaje que venía de Occidente, según el cual, conforme al Evangelio, no solo el soberano sino también el pueblo es voz de Dios y las dos voces son mutuamente complementarias. La Iglesia rusa nunca ha entendido que no es el emperador sino el Papa quien es Vicario de Cristo y que el gobernante civil es, como dice santo Tomás de Aquino, "vicem gerens multitudinis".

----------Como la Iglesia y el gobierno rusos, Rasputin no supo comprender la relación recíproca ya intuida por Aristóteles y confirmada por el Evangelio de monarquía, aristocracia y democracia. Su odio por la aristocracia se parece extrañamente a lo que será el odio de los bolcheviques. La aristocracia y la jerarquía no significan nada más que quien puede más debe hacer más.

----------A la aristocracia en el campo civil corresponde la jerarquía sacerdotal en el campo eclesiástico. Rasputin acompañaba el desprecio por la aristocracia con un desprecio por la jerarquía eclesiástica extraño a la Iglesia ortodoxa, que denota una influencia luterana.

----------La iglesia rusa, después de lo que ha pasado, ¿podrá aprender de la historia? ¿Sabrá comprender los orígenes primeros de la falsa mística que la ha engañado, y entender que ésta tiene sus primeros orígenes en su cisma de Roma y por consecuencia en su rechazo a aceptar la concepción tomista de la mística?

   

Una mística cismática

   

----------Para examinar autorizadamente un caso como el sucedido con Rasputin habría sido necesaria una investigación que solo la Sede Apostólica romana habría podido afrontar y conducir a buen término con éxito, como se ha verificado en la historia de la Iglesia católica en casos similares. La Iglesia cismática rusa se vale indudablemente del discernimiento episcopal, pero como en ella falta la apelación a Roma, que es la Sede que goza de un discernimiento superior y decisivo, basado en el carisma petrino, cuando ocurren casos tan graves como el sucedido con Rasputin, el simple carisma episcopal no es suficiente.

----------De hecho, la autoridad eclesiástica en su momento inició una investigación, que sin embargo fue enterrada debido a la oposición de los Obispos amigos de Rasputin. Si casos tan penosos nos ocurren a nosotros los católicos, que en principio podemos valernos de la autoridad de la Santa Sede, imaginemos lo que puede suceder en la Iglesia ortodoxa que carece del auxilio del Papa.

----------Además, hay que tener presente que el contenido intelectual de la experiencia mística cristiana, a fin de que la experiencia sea genuina y fecunda de gracia y buenos frutos, debe estar libre de lagunas y errores, cosa que lamentablemente falta en la Iglesia ortodoxa cismática, privada de la plena comunión con Roma.

----------Si el contenido conceptual de la supuesta experiencia mística es defectuoso o está ausente, como sucede a veces también en campo católico, por causa eventualmente de una doctrina mística errónea de tipo atemático o emotivista o sentimental o idealista o sensualista.

   

El plan divino acerca de la unión del varón y la mujer

   

----------El libro del Génesis dedica los dos primeros capítulos a la creación del varón y de la mujer y a la explicación del sentido y del valor de su unión. El primer capítulo enseña que la pareja ha sido creada para la reproducción de la especie en una condición de unión con Dios caracterizada por la posesión de una gracia que asegura la inmortalidad, pero sin superar los límites de las potencias naturales del hombre, como sucederá en cambio con la concesión por parte de Dios Padre de la filiación divina a la venida de Cristo.

----------El segundo capítulo, en cambio, prospecta una unión del varón y de la mujer como expresión del amor: una condición humana que evidentemente supera a la primera y comporta una humanidad llegada a una plenitud final ya no más sujeta al crecimiento numérico.

----------Por otra parte, la narración del pecado original en el capítulo tres introduce una nueva condición de la humanidad: la de la naturaleza herida y caída, sujeta al sufrimiento y a la muerte, inclinada al pecado, castigada por Dios. Sin embargo, en el mismo capítulo tres, Dios promete una reparación, una reconciliación, un perdón y una salvación. Esta es la condición que vivimos ahora, redimidos por la sangre de Cristo.

----------¿Qué destino nos espera? El Padre no sólo nos ha liberado del pecado y de la muerte dándonos a su Hijo, sino que en Él nos ha hecho hijos de Dios, de tal manera que será posible que el varón y la mujer vivan en la vida futura según el modelo del capítulo dos del Génesis. Mientras tanto, para preparar la vida del mundo futuro, Cristo aconseja la abstinencia sexual total en los religiosos y ordena la abstinencia periódica en los casados, a fin de hacer posible la reproducción de la especie.

----------Dios quiso originariamente la unión del varón con la mujer. Y lo que está en el origen, está al final. Por eso la escatología es recuperación y superación de la protología. Sin embargo, Cristo, considerando que en la presente naturaleza caída tal unión puede obstaculizar la libertad del espíritu, he aquí que expresó estas palabras: "Si tu ojo te escandaliza, quítatelo" (Mt 5,29).

----------Dios, sin embargo, ha creado el ojo para que vea. Un discurso similar debe hacerse para la unión del varón y la mujer: esta unión corresponde a la voluntad divina protológica y escatológica. Pero Jesús nos advierte que si alguien quiere seguirlo hasta el fondo, y esta unión le obstaculiza, es bueno que renuncie a ella precisamente con vistas a rencontrarla en el cielo libre del pecado y de la concupiscencia. He aquí el céntuplo del cual habla Cristo para los que dejan todo para seguirlo.

----------El misticismo de Rasputin pretendía en cambio poner ahora sobre esta tierra esa unión entre varón y mujer que solo es posible en el cielo. Ciertamente, aquí abajo podemos saborear las primicias de la vida celestial, que sin embargo no dispensan de la práctica de la abstinencia y de la mortificación de la carne, cosas de las cuales pretendía en cambio ser dispensado Rasputin.

----------Aquí abajo comienza lo que estará completo allá arriba. Pero el hombre viejo no está completamente muerto, mientras que el hombre nuevo aún no ha llegado a la perfección. Aquí estamos como en un hospital. Todavía estamos bajo cura, pero ésta se atenúa y se hace inútil a medida que nos curamos, y la curación cesará por completo cuando en el momento de la muerte estemos completamente sanados.

----------La práctica de la abstinencia sexual es alabada por nuestro Señor Jesucristo como condición para entrar en el reino de los cielos y como condición para aquellos que son llamados a una mayor libertad espiritual en su dedicación a Dios, pero la abstinencia sexual es solo una práctica de emergencia, relativa a la actual condición de la naturaleza humana herida por el pecado, donde la carne se rebela al espíritu, por lo que, para asegurar al espíritu su libertad, es necesario renunciar a la carne. De la misma manera, el medicamento es necesario si uno está enfermo, pero no es necesario si uno está sano.

----------Ahora bien, así como Dios es creador tanto de la carne como del espíritu, Él quiere que la carne y el espíritu se reconcilien, de modo que la carne obedezca al espíritu y el espíritu trate a la carne con respeto y juntos constituyan la persona humana, varón y mujer, según la voluntad del creador.

----------Grigori Rasputin se sintió enviado por la Virgen de Kazan para llevar a cabo su misión para la grandeza de la Santa Rusia. El zar Nicolás II, pocos días antes de su martirio, consagró a Rusia a la venerada Virgen de Kazan. Sorprendente coincidencia y encuentro en el nombre de la Virgen de los dos personajes clave de la tragedia que habría de conducir a la revolución atea comunista de 1917: Rasputin, al que se le acusa de haber hecho caer la dinastía Romanov, y el zar Nicolás, hombre de fe pero débil e irresoluto frente al libertino, hereje y falso místico Rasputin. Nicolás, sin embargo, se redimió perdonando a sus asesinos y negándose a ser liberado por el Ejército Blanco para evitar un derramamiento de sangre.

----------Por este acto heroico final, aunque la vida anterior de Nicolás no fue del todo edificante, la Iglesia rusa lo ha canonizado como mártir ("aquel que ha sufrido la pasión de Cristo"), mientras que el actual gobierno ruso lo ha rehabilitado declarando ilegítimo el proceso que lo condenó a muerte junto con su familia. ¿Acaso pueda ser éste un presagio de paz para Rusia y para el mundo?